Los políticos teledirigidos tienen mucho peligro si no saben ni dónde van
Cuando un partido invita a una capital de provincia a su número tres a nivel nacional lo último que espera es que éste le clave una puñalada en la espalda. Y es que para el PSOE de Castilla-La Mancha si Óscar López hubiera dimitido cuando metió la pata en el famoso caso de Ponferrada se hubiera evitado que le dejara en el más espantoso de los ridículos.
El secretario de Organización del PSOE visitó ayer la ciudad de Cuenca para mantener una serie de obligadas reuniones. Flanqueado por los dos pesos pesados de los socialistas de la provincia de Cuenca, Luis Carlos Sahuquillo y José Luis Martínez Guijarro, se dirigió a los medios de comunicación para repetir la cantinela que viene repitiendo en los últimos días (la última en Extremadura, donde dijo lo mismo) aunque en esta ocasión se pasó de frenada. En su papel más crítico con el Gobierno de Rajoy, no se le ocurrió otra cosa que decir que «sabemos que el modelo del PP es el de aeropuertos sin aviones y el de estaciones sin trenes».
Y lo soltó como si tal cosa delante de periodistas y de sus compañeros de partido en la región que se ha hecho famosa a nivel internacional por tener como ejemplo de despilfarro de dinero público – de la mano precisamente del PSOE – el aeropuerto de Ciudad Real. Lo soltó en la tierra que ha visto perder una de sus señas de identidad, Caja Castilla-La Mancha, por su nefasta gestión y apoyo incondicional a su puesta en marcha (era la tercera dueña del malogrado aeropuerto) y lo soltó en la ciudad natal de uno de los empresarios que apostó fuerte por el aeropuerto y acabó perdiendo casi todo, incluido el único diario de la provincia. Se le olvida a López donde habla y que la gente de esta tierra lo está pasando mal precisamente por el despilfarro en aeropuertos fantasma del anterior gobierno socialista.
Esta metedura de pata le llega al PSOE en un momento, para variar, difícil después de saber gracias a Antonio Miguel Carmona que los dirigentes socialistas acuden a los actos telediridos. ¿Quién habrá dicho a López que eso que dice tiene gracia y que llega bien a la gente? El líder de los socialiastas en la región, Emiliano García-Page, tiene que estar que trina.
EL PAPELÓN DE ÁVILA
A López, además, le preguntaron por el futuro político del alcalde de la ciudad, Juan Ávila, ausente precisamente en la comparecencia de prensa de su número tres. López hizo de político y con una frialdad que llamó la atención a más de uno señaló su futuro dependerá de él y de los militantes. Menos mal que no le preguntaron por el caballo blanco de Santiago. A lo mejor nos sorprende.
