Hace apenas una semana Page aseguró que Bárcenas no le merecía ninguna credibilidad
El secretario general del PSOE en Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, no es Bono ni se le parece. En realidad, nadie le ha pedido que se le parezca pero sí es cierto que muchos de los nostálgicos del Audi y los suelzados que se manejaban por aquí creyeron ver en él una especie de reencarnación, un regreso al futuro casposo de los noventa. Tampoco es un monstruo con cuernos y sin corazón para los «populares» ni un político que pasará a la historia por ser un gestor capaz y brillante, qué va. Es un señor de Toledo que ha tenido, eso sí, la suerte de tener padrinos y estar en el lugar correcto en el momento adecuado porque no hay que olvidar que Page está donde está gracias al apoyo que IU le brindó tras las elecciones de 2007 en las que, con toda la maquinaria de la Junta de Comunidades – eso sí era una maquinaria propagandística que ríete tú de los regímenes comunistas – a su favor, perdió contra José Manuel Molina. Page, con toda su verborrea y sus chascarrillos, no es más que eso.
Por eso no es de extrañar que a veces se haga un lío y donde dijo Diego hace unos días diga hoy otra cosa distinta. Es, según nos cuentan, muy comentado en Toledo la reacción de Page al lío montado por la supuesta comisión de 200.000 euros que según Luis Bárcenas se llevó el PP por la adjudicación del servicio de basuras. Y es muy comentada porque en un primer momento, el pasado 9 de julio, el todavía alcalde de Toledo aseguraba respecto a esa supuesta comisión que nadie encontrará nada en la adjudicación del citado contrato y que «Bárcenas no me merece ninguna credibilidad, pero se está inculpando, dice que ha cometido una fechoría, pero no sólo él».
Eses mismo día, el 9 de julio, Page anunció la creación de una Comisión de Hacienda «para poner a disposición de todos los concejales ese expediente, y yo quiero estar al margen», dijo. Esto, nos aseguran, es cuanto menos raro porque el alcalde de una ciudad no se debe mantener al margen de nada que ocurra en su ayuntamiento…
Ayer mismo, sin embargo, el portavoz del Equipo de Gobierno de Page, Rafael Perezagua, anunció que el Ayuntamiento de Toledo está estudiando la opción de presentarse como acusación particular en el caso Bárcenas tras la «supuesta comisión» cobrada. Sin embargo, rechazó que el Ayuntamiento vaya a realizar una comisión de investigación, razonando que «la investigación está en sede judicial y hay que dejar trabajar al juez Ruz».
En apenas una semana Bárcenas ha pasado de ser un personaje que no merece ninguna credibilidad, Page dixit, a ser el bastón en el que se apoya el PSOE para intentar erosionar al Gobierno regional. Son este tipo de ambigüedades las que mejor definen la forma de hacer política de Page y los suyos, muy lejos de la rotundidad con la que ayer desmintió «cada una de las mentiras y calumnias» de Luis Bárcenas el secretario general del PP de Castilla-La Mancha, Vicente Tirado.
