"No son verdad ninguno de los hechos por los que fui condenado"
El abogado Manuel Maza, encargado de la defensa de Daniel Galván, condenado a 30 años de prisión en Marruecos por delitos de pederastia y posteriormente indultado por Mohamed VI, ha interpuesto un recurso de reforma contra el auto que mandó a prisión a su defendido, y reclama su «inmediata puesta en libertad», aunque sea con medidas cautelares.
El letrado acudió a ver a su defendido en la prisión de Soto del Real, en Madrid, donde se encuentra ingresado tras ser detenido el lunes 5 de agosto, en un hotel de Murcia y puesto a disposición de la Audiencia Nacional, que decretó su prisión provisional.
ESTÁ MUY TRANQUILO
El abogado encontró a Galván «muy tranquilo», aunque admite que se le ve «afectado por los problemas mentales» que se certifican en la documentación que el propio extraditado facilitó al letrado, y que éste aportó al Juzgado Central de Instrucción número 4 de la Audiencia Nacional, encargado del caso.
«Se le van un poco las ideas pero está tranquilo y dispuesto a aguantar lo que sea, pero con deseo de que se pueda aclarar la verdad de todo este asunto».
«NO SON OBSCENAS»
Durante el encuentro, Galván aseguró a su letrado que «no es verdad nada de los hechos por los que se le condenó». Admite que, efectivamente, hizo «grabaciones», pero que se trata de grabaciones «que no son obscenas» y que «no tienen nada que ver con los delitos por los que ha sido condenado».
El abogado añade que el «problema mental» de su defendido es tan «pronunciado» que, incluso, «se aduce en los partes médicos», y cree que «tendría que haberse tenido en cuenta, por lo menos, como atenuante». Con esa «problemática», confirma que la pena «no pudo ser jamás la que se le impuso finalmente en Marruecos», consistente en 30 años de prisión.
Galván también se ha declarado inocente de los hechos denunciados por un vecino de Torrevieja (Alicante) por presuntos abusos sexuales cometidos a su hija, menor de edad, «hace años», y por los que el Juzgado de Instrucción número 4 de Torrevieja ha acordado enviar un exhorto para que sea citado a declarar. En concreto, manifestó a su letrado que, «por descontado», los hechos denunciados en este caso «no son ciertos».
RIESGO DE FUGA
El letrado fundamenta su recurso en que «no hay riesgo de fuga» y defiende que Galván no había intentado escaparse, sino «todo lo contrario». De hecho, confirma que el pederasta acudió el pasado lunes, 5 de agosto, horas antes de ser detenido, a entrevistarse con el delegado del Gobierno en Murcia, Joaquín Bascuñana, para «ponerse a su disposición».Igual que hubo «un error en la concesión del indulto», Maza cree que pudo haber también «un error por la Sala de apelación que lo condenó».
Afirma que estos problemas «mentales» están «documentalmente probados», ya que Galván cobra una «una pensión por invalidez». Por ello, se pregunta «cómo es posible que no acepten ese atenuante, para ponerle la pena que le pusieron».
El abogado también justifica la puesta en libertad de Galván en que tiene amigos en la Región de Murcia y es propietario de un apartamento en Torrevieja (Alicante) que tiene alquilado.
Extradición
Maza defiende que «no es posible, obviamente» extraditar a su cliente, «al ser español», algo que «lo admite incluso Marruecos». Además, asegura que el indulto, una vez concedido, «no puede ser anulado así por las buenas, por mucho error que hubiera».
A pesar de haber sido revocada por el monarca alauí, Maza dice que una vez concedido el indulto, «no se puede anular, la pena ya se ha extinguido. Eso es lo que contempla todo principio de derecho». No obstante, explica que «todavía no hay nada legislado» sobre la posibilidad de anular un indulto, y conlleva «una problemática a dilucidar todavía aquí en España por la Audiencia Nacional».
REPETIR EL JUICIO
Una de las soluciones, afirma, sería «repetir el juicio», y otra posibilidad es «dejar la cosa como están y, con el indulto por delante, no seguir el proceso contra Galván a no ser, por ejemplo, que haya una denuncia nueva como la de Torrevieja».
También cabe, reconoce, que Galván cumpla la pena en España, pero cree que esta alternativa «no es posible», y él se opondría «rotundamente» porque la pena «ya no existe, está indultada».
Lo lógico, según el abogado, es que el recurso de reforma interpuesto contra el auto de prisión «se admita a trámite» y se le dé traslado del mismo al Ministerio Fiscal por dos días. En el tercer día se debería dictar una resolución «conforme solicita la defensa, es decir, dejando sin efecto la prisión y decretando la libertad».