El suceso se registró uando unos agentes acudieron a casa de su pareja para defenderla
La Confederación Española de Policía (CEP) ha criticado este sábado 2 de noviembre la «escandalosa» puesta en libertad de un hombre que fue detenido la noche del pasado miércoles 30 de octubre y que «intentó matar» a un agente en dos ocasiones tras apoderarse de su arma reglamentaria, durante una intervención por violencia de género.
En un comunicado, la CEP ha lamentado que la juez de guardia no haya tenido en cuenta la petición de ingreso en prisión efectuada por la Fiscalía y ha recordado que este individuo ya había provocado, en una ocasión anterior, un incidente con su pareja al tratar de apoderarse de su hijo sin el consentimiento de ella, obligándola a refugiarse en el cuartel de la Guardia Civil de la calle Manuel Azaña de Palma.
MALOS TRATOS Y VEJACIONES
No obstante, el pasado miércoles el suceso se inició cuando, en una discusión con su pareja, ésta requirió a la Policía, a través del novio de una amiga, para que abandonase el domicilio, debido a los malos tratos y vejaciones a las que presuntamente le sometía. Sin embargo, a la llegada de los agentes, su pareja adoptó una actitud violenta, apoyado por su hermano.
Así, uno de los agentes, tratando de lograr su reducción, forcejeó con el sospechoso y, «de no haber sido por las medidas de seguridad adoptadas, habría muerto por los disparos que trató de efectuar en dos ocasiones, tras apoderarse del arma reglamentaria del agente». La primera, indica la CEP, fue apuntándole al abdomen y apretando varias veces el gatillo y la segunda, momentos después, llegando a quitar el seguro del arma y no consiguiendo su objetivo al no tener una bala en la recámara.
PATADAS Y MORDISCOS
Además, dio una serie de patadas en la cara a uno de los agentes, así como un mordisco en la mano del policía que trataba de recuperar su arma para evitar que el detenido le disparase.
«La sorpresa del colectivo policial ha sido mayúscula cuando, aun contando con una petición fiscal de ingreso en prisión, la juez de guardia decreta la puesta en libertad de una persona que puso en claro riesgo la vida de un agente y que, por su violencia, demuestra que la integridad física de su pareja e hijo corre un riesgo extremo».
«La medida nos parece frívola, poco meditada y demuestra a las claras la escasa sensibilidad de la juez de guardia con el riesgo que asumen los policías en su trabajo. Esta puesta en libertad, además, sienta un mal precedente y es un pésimo mensaje para todas aquellas personas que puedan participar en sucesos de tanta gravedad. Frente a lo que en nuestra opinión es una mala praxis judicial, debemos destacar la actitud del Ministerio Fiscal y elogiarla».
Por ultimo, han destacado que este tipo de incidentes «no acaban en dramas» por la profesionalidad de los agentes, que saben adoptar las medidas pertinentes para no sufrir consecuencias irreparables. En este sentido, la estadística de diligencias previas incoadas en los últimos años en Baleares por atentados y desobediencia grave a la autoridad han ido descendiendo paulatinamente.
En 2012, se registraron 182 procedimientos por un delito de atentado (frente a los 228 de 2009 o los 192 de 2011) y 143 por resistencia o desobediencia grave a agentes (222 en 2009 o 169 en 2011). Según su opinión, la estadística pone de manifiesto que la tónica que se ha seguido en los últimos años, en cuanto a agresiones a policías, es claramente descendente, una mejora cívica que creen que debe continuar y por la que han reclamado «más celo profesional».