La secretaria general del PSIB señala que el Govern se va a seguir endeudando con los bancos hasta alcanzar los 1.088 millones de nuevo pasivo financiero
La líder del PSIB, Francina Armengol, ha asegurado este sábado 2 de noviembre que los presupuestos de la Comunidad para 2014 del Govern de José Ramón Bauzá
«no afrontan las necesidades reales de una sociedad castigada por la crisis, ya que destinan un 25 % a pagar a los bancos y apenas un 1 % a políticas activas de empleo».
A su juicio
«no son unos presupuestos para el crecimiento económico, sino todo lo contrario», ha subrayado Armengol en una rueda de prensa en la que ha recordado que el presidente del ejecutivo prometió un plan de fomento del empleo que no tiene ningún reflejo en el proyecto de cuentas públicas que ha planteado ante el Parlament».
La secretaria general del PSIB ha señalado que aunque el Govern anuncia que la economía balear está saliendo de la crisis, prevé ingresar en 2014 unos 92 millones de euros menos a través del IVA y el IRPF, lo que refleja que cuenta con que el consumo siga estancado y los ingresos de las familias continúen cayendo.
MÁS DEUDA
Además, ha criticado que el Govern se vaya a seguir endeudando con los bancos hasta alcanzar los 1.088 millones de nuevo pasivo financiero y subir la deuda de la comunidad hasta cotas nunca vistas, pero no para realizar inversiones y mejorar los servicios sociales, sino para devolver el dinero más rápido a la propia banca.
Armegol ha incidido en que el Govern prevé endeudarse el año que viene en 376 millones más, por encima de los 266 millones que le permitiría el techo de déficit del 1 % impuesto por el ejecutivo central, lo cual contradice el precepto de «no gastar lo que no se tiene» del que hace gala el PP.
RÉPLICA
Estas apreciaciones han sido contestadas por El PP, que se ha preguntado si la portavoz del PSIB en el Parlament, Francina Armengol, está llamando a la «insumisión bancaria» y ha respondido que «claro que el Govern paga a los bancos» porque, después de que durante la legislatura pasada estuviesen «de fiesta», pasándoselo «pipa» y «tirando de tarjeta», durante ésta «llegan los recibos» de la VISA.
Según el portavoz del PP balear, Miquel Ramis, las cuentas públicas de las islas son las «posibles en estos momentos» puesto que consolidan el crecimiento económico iniciado en las islas, y se paga a proveedores y ciudadanos -los bonos patrióticos-.
Ramis, quien ha pedido «un poco de seriedad y coherencia» a la oposición, ha criticado también el papel desarrollado por PSIB y MÉS en los Presupuestos Generales del Estado de 2014. En este sentido, ha defendido que, mientras los ‘populares’ han presentado una «enmienda razonable» y «cosas que se pueden aprobar» los «ilusos» de los econacionalistas reclaman 6.700 millones de euros en inversiones que saben que no llegarán a las islas.
«Son unos visionarios, unos ilusos, esto se lo digo a Biel Basrceló», ha dicho al portavoz de MÉS, tras indicar que «pedir todo lo que no has hecho cuando gobernabas es un ejercicio de hipocresía y un despropósito».
Ramis, quien ha admitido que el PP también desea una mayor inversión prevista en los PGE, ha remarcado el trabajo que les ha costado introducir la enmienda que supondrá una inversión de 74 millones de euros en inversiones hidráulicas en las islas y ha criticado también las enmiendas del PSOE, «que pide cosas que no hicieron cuando gobernaban».
«SE TIRÓ DE TARJETA Y LOS RECIBOS LLEGAN AHORA»
En relación a los Presupuestos de la comunidad presentados el pasado lunes, el ‘popular’ ha subrayado que garantizan los servicios básicos y ha señalado que el pago a los bancos es porque durante el anterior Govern «se tiró de tarjeta de crédito y los recibos nos vienen ahora a nosotros». En este sentido, ha comparado esta situación con la de una familia que, antes de hacer obra social, debe pagar sus préstamos.
Además, ha criticado las palabras de Armengol y ha dicho que su postura con los Presupuestos reafirma que han «perdido el norte y no está cumpliendo su función de oposición»:
«Hace falta una oposición más sería, que no quieran ser más verdes que Els Verds o más nacionalistas que El Pi».