La renovación del guardameta del equipo catalán parece complicarse ya que el club no acepta las condiciones del jugador.
Según informa fichajes.net, la renovación de Kiko Casilla por el Espanyol parece empezar a complicarse ya que el portero no quiere que en el nuevo contrato su salario se vea reducido, algo que el Espanyol si quiere.
Por ello, a pesar de que el portero ha afirmado en más de una ocasión que su intención es quedarse, puede que cambie de opinión ya que la renovación no se cierra y tiene varias ofertas sobre la mesa.
El portero tiene contrato hasta el 2015 y por ello podría decidir quedarse un año más en el club perico y marcharse gratis o renovar la próxima temporada, algo que el Espanyol no quiere.