El centrocampista del Valencia, Míchel Herrero, afirmó que no piensa «tirar la toalla» porque su sueño es jugar y ser importante en su actual equipo, en el que le queda dos años de contrato que quiere cumplir.
«Mi ilusión siempre ha sido jugar con el Valencia. Me dieron la oportunidad y quiero triunfar aquí, aunque hay mucha competencia y no es fácil», prosiguió el futbolista, quien reconoció que le hubiera gustado disponer de más minutos durante la temporada.
A pesar de los altibajos durante todo el año, Míchel quiso quedarse con el buen papel que realizó el equipo en la Liga Europa. «Ha sido un año muy difícil, pero hay que ser positivos. Estuvimos a unos segundos de estar en una final», indicó.
El centrocampista valenciano repasó la actualidad extradeportiva del club, inmerso en el proceso de venta, y admitió que la plantilla no está «tranquila».
«Nadie está tranquilo. Queremos que cuanto antes se arregle la venta del club para que venga alguien y aporte. Nosotros confiamos en el presidente y sus consejeros y sabemos que elegirán la mejor opción. Vamos hacia final de temporada con un poco de incertidumbre de saber cómo va a ir todo», aseguró.
Finalmente Míchel, que militó el año pasado en el Levante, habló del derbi que medirá a los dos equipos de la ciudad de Valencia el próximo sábado.
«Es un derbi en el que siempre hay una tensión importante y ninguno quiere perder ante el rival de la misma ciudad. Saldremos igual que ante el Real Madrid para intentar ganar e irnos con un buen sabor de boca», concluyó.
