Un policía municipal de Bilbao mató ayer en Baracaldo a sus padres, emigrantes gallegos de Vilasantar (Coruña).
El agente, Iñaki Lamas Lago, que cumplía este 8 de junio de 2014 mismo 51 años, había trabajado en el turno de noche y al salir fue a visitar a sus padres, Antonio Lamas Balleres, de 79 años, y Benigna María Lago Rodríguez, de 80.
Estaban muy enfermos. Ella sufrió un ictus hace dos años y no podía hablar. Él tenía vértigos, además de otras dolencias.