El todavía alcalde de Santiago, Ángel Currás, ha concluido que la resolución de la Junta Electoral Central (JEC), que ha validado las credenciales del equipo que acompañará a Agustín Hernández en el último año de mandato municipal, demuestra que los argumentos de la oposición –PSdeG y BNG– «no tenían base ninguna».
En este sentido, ha ironizado con que pueden pedir el amparo del Constitucional o «llegar a Estrasburgo» –al tribunal de derechos humanos– si quieren, pero ha incidido en que él «en ningún momento» tuvo «dudas de la legalidad y procedencia» de la decisión adoptada.
Así las cosas, en cuanto lleguen las credenciales se convocará el pleno extraordinario, para lo que tiene que pasar un mínimo de dos días hábiles.
Por otro lado, el pleno extraordinario también será el acoja el de renuncia de Currás como alcalde, para investir, a renglón seguido, al exconselleiro de Medio Ambiente en una sesión en la que el todavía regidor votará a favor de que Hernández se proclame como tercer alcalde en lo que va de mandato.
Currás aprovechó de nuevo su intervención ante los medios para manifestar que ha sido un «privilegio» haber dirigido el destino de la capital de Galicia y haber sido responsable del área cultural, pero ha rehusado volver a contestar sobre su futuro personal y aclarar cuando presentará su dimisión en la corporación.
Con todo, ha señalado que él también votará a Agustín Hernández como futuro regidor en posesión todavía de su acta.
El todavía alcalde reconoce que «uno siempre se marcha con sensación agridulce», un «privilegio» por haber podido «regir los designios» de la ciudad, y «agrio» por las «circunstancias» que «motivaron» esta marcha. En todo caso, ha asegurado que el Ayuntamiento «continuará en buenas manos».