En febrero de 2005, al día siguiente de que el entonces presidente de la Generalitat, Pasqual Maragall, espetara a CiU en el Parlamento catalán aquello de «ustedes tienen un problema,y se llama 3%», el empresario Juan Antonio Salguero denunció que él había tenido que pagar comisiones a los gobiernos de Pujol.
Y añadió -en su entrevista con Janot Guil de ‘ABC’– que en su caso fueron del 20%. La Fiscalía investigó y él acabó imputado en el caso Adigsa, aún pendiente de juicio. Tras el «mea culpa» público que hizo Jordi Pujol el pasado julio, confirmando que tuvo durante 34 años dinero oculto en el extranjero, las sospechas de comisiones durante su presidencia vuelven al primer plano.
-¿En 2003 pagó una comisión del 20%, 108.000 euros, por unas obras de reforma en 18 pisos sociales que gestionaba Adigsa, la promotora de vivienda protegida de la Generalitat. ¿Por qué pagó?
-Porque si no pagaba la comisión, no cobraba el trabajo y, entonces, yo no podía pagar a los que trabajaban para mí: el carpintero, el electricista…
-¿Quién le exigió la comisión?
-José María Penín, un pariente lejano del entonces consejero de Obras Públicas de la Generalitat, Felip Puig. (Penín, que ejerció de tasador para la Generalitat, está imputado en el caso Adigsa). Pero él no pedía directamente la comisión. Yo le entregaba la factura y me decía que la aumentara en un 20% o, si no, no la tramitaría. Y no la cobraría.
-Encima, la mayoría de viviendas sociales que rehabilitó no se adjudicaron…
-Lo que sé seguro es que, al menos cuatro o cinco de ellas, seguían vacías meses después. Las prisas en 2003 para contratarme a mí y a otra serie de personas para hacer obras era porque se acercaban las elecciones (las autonómicas, que fueron ese mismo año) y querían colgar los cartelitos estos de pisos rehabilitados por Adigsa para el Plan Joven… Y supongo que con el 20% de comisión que exigían se pagarían parte de la campaña electoral…
-¿Conoce más casos de empresarios que pagaron comisiones?
-A la persona que me introdujo a mí en Adigsa también le pidieron el dinero, pero él no pagó. Y a día de hoy aún no ha cobrado los trabajos que hizo… Entiendo que los demás que hicieron trabajos y cobraron pagarían las comisiones…
-¿Cree que Mas sabía del pago de comisiones durante la presidencia de Jordi Pujol?
-Hombre, obviamente, sí. La persona que tenía al lado Mas (entonces consejero jefe de la Generalitat) era Felip Puig. Además, a Puig le llamé, le dije que me pedía dinero y me preguntó: «Ah, ¿y cómo estás pagando?». Yo le dije, «en metálico y me respondió: «Ah, vale», y adiós. Además, al día siguiente de que Maragall dijera lo del tres por ciento en el Parlament ante Mas, yo le envié un e-mail a Mas y le dije que las comisiones no eran del 3 por ciento, sino del 20 por ciento.
-¿Y qué hizo Mas?
-Pues en lugar, por ejemplo, de enviarme a los Mossos para que lo denunciara me envió a su jefa de Prensa, cuyo nombre no me acuerdo bien. Me reuní con ella una hora… y me dijo que callara. Hay testigos de esto. O sea: mientras Mas criticaba a Maragall por decir lo del tres por ciento en el Parlament me mandaba a su jefa de Prensa para que tuviera la boca cerrada…
-¿Sufrió represalias o amenazas tras denunciar el caso por parte de alguien de la Generalitat?
-No, pero poco después de denunciarlo Hacienda me hizo una inspección ilegal. Duró tres años, cuando lo normal es que sean de seis meses. Fueron tres años en los que no podía vender nada, que me costaron una enfermedad. Al final me tuve que ir del país. Estuve en República Dominicana, de donde volví hace seis meses. Ahora estoy en Sevilla, donde intentó volver a poner en marcha la empresa…
-Se ha criticado a la Oficina Antifraude de Cataluña por no hacer caso a denuncias sobre comisiones que hicieron empresarios u otros delitos que afectan a CiU.
-Sí, entre otros, yo mismo.
-¿Cuándo fue eso? ¿Qué pasó?
-Hace un año. Uno de los hermanos de Felip Puig (Jordi Puig) iba a hacer de inversor en Punta Cana, en la República Dominicana, para la construcción de un pequeño parque temático en un hotel. Puig quería invertir entre dos y 12 millones de euros. Yo iba a hacer parte de la obra. Al final, Puig se echó atrás y los socios le denunciaron allí por estafa…
-¿Ése era el delito que denunció a Antifraude?
-No. Yo les expliqué que entendía que el dinero que iba a invertir Puig venía de Andorra vía Panamá. Les expliqué la operación del parque, que había sido denunciado en República Dominicana, les dije el testaferro es éste, el abogado es éste, éste el socio, ésta es la cantidad de dinero…
-¿Y que pasó?
-Pues al cabo de dos semanas de denunciarlo en la Oficina Antifraude me respondieron que con eso no tenían bastante…
-A raíz de las investigaciones a la familia Pujol ha vuelto a aparecer el tema de las comisiones. Manos Limpias ha anunciado que varios empresarios, como usted, puede acreditar el pago de estas mordidas… Además, está la confesión de evasión fiscal de Jordi Pujol… ¿Cómo cree que acabará todo esto?
-Pues, si no paran esto, el banquillo de acusados va a ser más grande que el de los ERE de Andalucía, que tiene casi 200 imputados… Tendrán que hacer el juicio en el Camp Nou.
