El ex jugador del Eche y el club se verán en los Tribunales tras la reclamción del rumano de 1,5 millones de euros tras rescindir su contrato.
Según informa el Diario Información, el club alega para justificar el despido que el jugador pegó una nota adhesiva en el vestuario sobre su intención de cobrar íntegro su contrato y que brindó en actos públicos «por venir a disfrutar de las playas».