La defensa del senador y expresidente de la Junta de Andalucía José Antonio Griñán también ha formalizado el 17 de noviembre de 2014 su personación como parte en el procedimiento abierto en el Tribunal Supremo por los ERES presuntamente irregulares de Andalucía y, al igual ha hecho el diputado y también encausado Gaspar Zarrías, solicita declarar de forma voluntaria «con la finalidad de prestar la máxima colaboración en estas diligencias de investigación».
Así se señala en el escrito que su letrado José María Mohedano ha presentado ante el alto tribunal, en el que se solicita la comparecencia en relación con el artículo 118 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal (LeCrim), que faculta a los aforados nacionales a pedir esta comparecencia en su defensa antes de que pueda producirse su imputación formal.
Esta imputación formal, según las fuentes consultadas, no se produciría hasta el momento en que, en el caso de ver indicios, el instructor del Supremo solicitara formalmente el preceptivo suplicatorio a las Cortes.
Así, en el escrito se pide al instructor Alberto Jorge Barreiro que acuerde «señalar día y hora» para la comparecencia de Griñán «tras los trámites que procedan». Con éste son ya tres los encausados que se han personado formalmente ante el alto tribunal. Se trata de Griñán, el exvicepresidente andaluz y actual diputado Gaspar Zarrías, que también lo hizo el 17 de noviembre y la senadora y exconsejera Mar Moreno, que lo había solicitado hace varios meses, después de que la juez Alaya remitiera al alto tribunal su exposición razonada.
El resto de exmandatarios contra los que se dirige la acción penal son el expresidente Manuel Chaves y el exconsejero José Antonio Viera, ambos diputados del congreso.
PETICIÓN DE ZARRÍAS
El escrito presentado por la defensa de Zarrías, que ejerce el abogado Gonzalo Martínez-Fresneda, también hace mención al artículo 118 de la LeCrim.
En fuentes de ese despacho se ha explicado que no se espera una respuesta inmediata del instructor, dado que el auto por el que se abrió el procedimiento es recurrible y aún no ha adquirido firmeza. No se descarta tampoco que el magistrado pudiera solicitar algún tipo de documentación antes de proceder a las citaciones.
En todo caso, de producirse la citación de Zarrías, Griñán y del resto de los investigados, y dado que sus defensas también han anunciado que solicitarían su declaración voluntaria en el Supremo, todos ellos comparecerían en calidad de imputados –es decir, asistidos de sus letrados–, aunque la citada imputación no sea aún formal.
El magistrado instructor Jorge Barreiro será el encargado de admitir o no estas peticiones de declaración voluntaria, que no sustituyen a la tramitación de los preceptivos suplicatorios ante el Congreso y el Senado de encontrarse indicios contra los aforados, según las fuentes consultadas.
El Supremo hizo público el 13 de noviembre un auto el que hace constar que en este momento procesal le corresponde exclusivamente verificar si en la exposición motivada que le ha sido reenviada se consignan hechos que, «según una valoración muy provisional pudieran ser delictivos, y si existen indicios consistentes, o dicho de otra forma, principios de prueba de la participación en ellos de las personas aforadas».
