El proceso independentista que lidera el presidente de la Generalitat, Artur Mas, no le está saliendo gratis a Cataluña.
La incertidumbre política que generan CiU y ERC se ha traducido en una fuerte caída de la inversión extranjera en Cataluña y, lo que es más grave, en un importante aumento de las desinversiones.
Todo lo contrario ocurre en Madrid, donde la inversión recibida quintuplica la percibida por Cataluña, y en el resto de España, donde las desinversiones se han reducido a menos de la mitad gracias a la recuperación económica.
Explica Jordi Sacristán en ‘El Economista’, que según los últimos datos publicados por el Registro de Inversiones del Ministerio de Economía y Competitividad, el empeoramiento en la percepción de la comunidad catalana entre los inversores extranjeros es una realidad y ni los efectos positivos de la recuperación económica compensan la incertidumbre que genera una hipotética independencia.
En los nueve primeros meses de 2014, la inversión extranjera en Cataluña descendió un 45% respecto al mismo periodo de 2013, al pasar de 1.999 millones de euros a 1.094 millones, según el Registro de Inversiones del Ministerio de Economía.
En ese mismo periodo de tiempo, la Comunidad de Madrid recibió inversiones por valor de 5.091 millones, lo que casi quintuplica la cifra que logró Cataluña.
Estas cifras profundizan las diferencias entre la capital española y la comunidad autónoma catalana en cuanto a inversiones foráneas recibidas a pesar de que el peso económico y el PIB de ambas regiones es similar.
Desde finales de 2010, la Comunidad de Madrid ha recibido 42.569 millones de inversión extranjera, casi cuatro veces más que los 11.464 millones de Cataluña.
Según un informe elaborado por la plataforma anti-independentista Convivencia Cívica Catalana, existe un trasvase del interés de los inversores foráneos desde Cataluña hacia el resto de España.
Por ejemplo, los inversores de América del Norte e Hispanoamérica han reducido su volumen invertido en Cataluña mientras han duplicado sus inversiones en el resto del país.
Más desinversiones
Según denuncia esta entidad, la incertidumbre política ha provocado que las desinversiones de extranjeros en Cataluña aumenten un 42 por ciento, hasta los 313 millones, mientras que las desinversiones en toda España se reducen de 3.415 millones a 1.514 millones.
La disminución del interés por invertir en Cataluña ha sido generalizada por parte de inversores procedentes de las principales áreas geográficas del mundo: Europa (un 39% menos), América (un 74% menos ), Asia (un 55% menos ) y el conjunto de la OCDE (un 44% menos).
Por sectores productivos, todos han recortado inversiones en Cataluña, con especial incidencia en el sector financiero, donde la inversión extranjera retrocedió un 84%. También es significativa la caída de inversión en la industria de manufactura, que engloba textil, fabricación de vehículos y metalurgia.
Las multinacionales extranjeras han reducido su inversión en Cataluña en un 73%, mientras la han incrementado en el mismo periodo de tiempo en el resto de España en un 34%. Convivencia Cívica Catalana atribuye estos hechos a la creciente inestabilidad política.