Sucedió al filo de las dos de la tarde de este martes 27 de enero de 2015 en Cala Tarida, un bello enclave ibicenco que se ha convertido en el escenario de un trágico suceso de imborrable recuerdo para sus protagonistas.
Allí, frente a sus amigos, un joven búlgaro le pidió a su novia que se casara con él, momento en que la chica, Dimitrina Dimitrova, de 29 años de edad, comenzó a dar saltos de alegría mientras los presentes aplaudían. Habían llegado para pasar unas románticas vacaciones.
PERDIÓ EL EQUILIBRIO
En ese momento perdió el equilibrio y cayó al vacío desde una altura de 20 metros.
Cuando llegaron los servicios de urgencia ella aún estaba viva, aunque inconsciente, pero fallecería de un ataque al corazón siete minutos más tarde, tal y como informa ‘Daily Mail‘.