El presidente del PP andaluz y candidato a la Presidencia de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, dijo el 10 de febrero de 2015 que el 22 de marzo los andaluces tienen la «gran oportunidad» de producir el «momento histórico» del cambio político en Andalucía con el PP, frente al «gobierno de la marmota» de Susana Díaz, que «siempre aprueba los mismos planes de empleo, promete hospitales que nunca abren y todos los días dice que le repugna la corrupción que no acaba».
En su intervención en los desayunos de Europa Press Andalucía, Moreno aseguró que desde el gobierno andaluz el PP «propiciará, por primera vez en democracia, un verdadero cambio político, económico y social en la comunidad». En este sentido se comprometió a «poner a funcionar» la comunidad en cuanto llegue a la Presidencia de la Junta, de manera que, en sólo dos años, Andalucía «será capaz de generar empleo al mismo ritmo que el resto de comunidades de España; se evitará el bloqueo de la administración y la pérdida de la calidad los servicios públicos esenciales; se pondrán las cuentas en orden; y se pagará a todos los sectores con los que mantiene deudas el gobierno andaluz».
Voy a devolver a Andalucía el prestigio y orgullo de su buen nombre con medidas regeneradoras, con un gobierno de ilusión, el único que puede hacer una verdadera regeneración política, económica social y ética.
El candidato del PP andaluz defendió la «moderación, consenso y estabilidad» como «valores fundamentales», y advirtió del «riesgo» que supone la «radicalidad» para la recuperación económica. «Los andaluces demandan un cambio, pero no quieren riesgos ni aventuras», dijo el líder del PP andaluz, quien subrayó que el PP «es el único partido que garantiza la estabilidad y representa el cambio seguro y responsable».
Así, expresó su disposición a «tender puentes y construir grandes acuerdos sobre políticas moderadas en las que la gran mayoría de los andaluces se sientan representados». «Mi empeño es ofrecer a los andaluces otro estilo de gobierno, capaz de sumar y alejado del sectarismo y los prejuicios», agregó.
Juanma Moreno recordó que Díaz ha rechazado todos los acuerdos que le ha planteado a lo largo de la legislatura, porque «la forma de entender y ejercer el poder de la señora Díaz ha sido incompatible con el diálogo y los pactos». «Quiero presidir un gobierno abierto y dialogante, de ilusión y de futuro», insistió.
Lamentó que con el gobierno de Díaz Andalucía haya «perdido años para la gestión autonómica y para la solución de los problemas», y dijo que el balance de gestión de esta legislatura en la comunidad es «una permanente vuelta al pasado» con «promesas que vienen de los tiempos de Chaves». Ante ello, propuso a los andaluces «dejar atrás la frustración y apostar por la confianza y el optimismo», que ofrece el proyecto del Partido Popular.
El presidente del PP andaluz manifestó que su gobierno será «cómplice de los andaluces» y que pondrá todos los activos al servicio del empleo con respaldo a los sectores más pujantes, a los emprendedores y a la industria innovadora con el fin de hacer la comunidad más atractiva a la inversión.
Además, hizo hincapié en la necesidad de garantizar la estabilidad política y la seguridad jurídica «para sacar todo el provecho de nuestros principales sectores».
Juanma Moreno presentó los pilares del proyecto reformista del PP en Andalucía, centrado en programas para el empleo, la reforma fiscal, los sectores productivos y la sanidad.
Dijo que no estará «satisfecho» mientras siga habiendo un solo andaluz sin oportunidad de trabajar ni se conformará con el objetivo «cicatero» de bajar del millón de parados. En este sentido aseguró que su gobierno no tendrá que «devolver ni un euro por mala gestión» y que no renunciará a que los andaluces recuperen el dinero defraudado, que destinará a empleo, sanidad y educación.
En materia fiscal, recordó que la reforma que propuso hacer unos meses dejará 400 euros anuales de media más en el bolsillo de los andaluces «para consumir y para invertir»; que «beneficiará de forma prioritaria a las rentas medias y bajas de nuestra comunidad», y que acabará con el «gravamen de la muerte» que es el Impuesto de Sucesiones y Donaciones.
En cuanto a los sectores productivos, se comprometió a «derribar todos los obstáculos que hoy tiene la Andalucía competitiva, dinámica y generadora de empleo» y a apostar por aquellos sectores que actúan de «palanca económica», como el Turismo y la Agricultura. Además, recordó su compromiso de poner en marcha un Plan de Industrialización para crear 37.000 empleos en los próximos dos años, así como su anuncio de ampliar a un año la ayuda de 426 euros, compatible con la contratación, a los parados de larga duración; y a dos años si encuentran un empleo estable.
Por último, en materia de Sanidad, hizo propuestas para acabar con la precariedad laboral de los profesionales de la sanidad y para construir las infraestructuras pendientes y mejorar la calidad del servicio.
«La política social y la prestación de servicios públicos tienen mucho más que ver con la buena gestión que con la ideología», dijo Moreno, quien añadió que en Andalucía «la izquierda presume de fachada social pero, en 32 años de gobierno, no ha garantizado servicios públicos de calidad para todos ni ha logrado la protección de los más vulnerables».
Concluyó diciendo que con un gobierno del PP en la comunidad «ninguna buena idea para crear puestos de trabajo se va a quedar en el cajón», y se mostró convencido de que «con políticas serias, moderadas y responsables, es posible una Andalucía en la que nadie se quede atrás», ya que «el PP ha demostrado en los ayuntamientos y en el Gobierno de España que en gestión y eficacia gana por goleada».
