Extremadura cuenta actualmente con un total de 196 plazas para atender a otras tantas personas con enfermedades mentales graves, tras la inauguración de un nuevo centro residencial de rehabilitación para estos pacientes situado en Mérida.
Este nuevo centro cuenta con 38 plazas, de las que ocho están en un piso supervisado, y está destinado a personas con trastornos mentales graves que carecen de recursos residenciales adecuados.
Para ello, el Servicio Extremeño de Promoción de la Autonomía y Atención a la Dependencia (Sepad) ha financiado el concierto de 38 plazas nuevas para personas con trastornos mentales graves por 2,4 millones de euros, que ha sido adjudicado a la empresa Grupo 5.
Con estas nuevas plazas, los enfermos «reciben una respuesta de una forma permanente y estacionada», según ha explicado el consejero de Salud y Política Sociosanitaria, Luis Alfonso Hernández Carrón, en unas declaraciones a los medios de comunicación durante la inauguración del nuevo centro.
Según ha apuntado el consejero, tanto el centro residencial como el piso supervisado compensan la ausencia de un soporte familiar adecuado y se convierte en una alternativa frente a la carencia de vivienda, «garantizando» el cumplimiento del modelo de continuidad de cuidados comunitarios y la atención de situaciones de dependencia.
Además, el titular de la cartera sanitaria y sociosanitaria ha resaltado que esta inversión ha permitido llevar el servicio de rehabilitación residencial a Mérida, una ciudad que hasta ahora carecía de este tipo de prestación, con lo que se completa la red regional conformada actualmente por este centro en Badajoz y por los centros de Plasencia y Cáceres.
«FIRME APUESTA POR LA SALUD MENTAL»
Asimismo, estas nuevas plazas conllevan una «disminución» de la lista de espera, ya que hay que tener en cuenta las pocas bajas que se producen al tratarse de recursos residenciales en los que las personas permanecen años desde su ingreso.
De igual modo, el consejero ha destacado la «firme apuesta» del Ejecutivo regional por la salud mental a lo largo de esta legislatura, un problema «que a veces pasa desapercibido para la inmensa mayoría de la sociedad, pero que está ahí y había que atenderlo».
En este sentido, ha recordado que además de esta inversión de 2.4 millones de euros, a finales del año pasado se convocaron subvenciones para este colectivo en 2015 por un importe de casi 800.000 euros, lo que supone un 13,5 por ciento más que el año anterior.
Para Hernández Carrón, la salud mental es «muy importante» desde el punto de vista sociosanitario, al tiempo que ha indicado que, por su importancia, «está dentro del plan de salud mental para Extremadura el mejorar las condiciones tanto de los enfermos, como de los recursos».
El consejero también ha destacado el «componente humano» que subyace en el trabajo que se realiza en centros como este y que «permite» prestar una atención especializada e integral tanto a las personas con trastornos mentales graves como a sus familias».
Cabe señalar que el consejero ha estado acompañado durante la inauguración por el alcalde de Mérida, Pedro Acedo, por la directora gerente del Sepad, Cristina Herrera, y por el director general de Asistencia Sanitaria, Juan José Garrido, entre otras autoridades.
