Entre las calles y plazas que se revisarán están vías tan significativas como el paseo Joan de Borbó -cuyo nombre se cambió durante la alcaldía de Pasqual Maragall- la avenida María Cristina o la céntrica plaza Joan Carles I
Lo de los socialistas en Cataluña no hay por donde cogerlo. Y si se coge, cuesta entenderlo, porque un día sale Iceta con la bandera española detrás y el siguiente y el anterior, respaldan los suyos a los exaltados que las quitan o dan sus votos para que los independentistas se hagan con badalona o cualquier otro sitio (La ‘amenaza’ del candidato del PSC: «En vez de mitin final, habrá baile con Iceta»).
Y mientras tanto, la Barcelona de Artur Mas, Ada Colau, la CUP y compañía sigue adelante con la depuración de los símbolos monárquicos.
Explica A. Gubern en ‘ABC‘ este 21 de septiembre de 2015 que, después de que de manera unilateral la alcaldesa ordenase retirar el pasado mes de julio el busto del Rey Don Juan Carlos que presidía el salón de plenos, el Consistorio de la capital catalana ha acordado proseguir con la «purga» trasladando la retirada a los nombres de al menos doce calles y plazas (El popular Xavier García Albiol pide a Ciudadanos y PSC un pacto contra la ruptura).
La medida forma parte del plan para eliminar la presencia de la familia Borbón en la vía pública -tal y como adelantó ABC que llevaría adelante el grupo de Esquerra Republicana-, y fue aprobada ayer en comisión por el grupo de ERC tras transaccionar el texto con Barcelona en Comú -en el gobierno municipal-, apelando a una pretendida «sobrerrepresentación monárquica» en la ciudad.
El grupo de CiU, que preside Xavier Trias, y la CUP apoyaron la iniciativa, mientras que el PP y C’s votaron en contra. Por su parte, el PSC se abstuvo, lo que contrasta con la rotunda postura con la que el grupo presidido por Jaume Collboni se opuso a la retirada del busto de Don Juan Carlos, que calificó de espectáculo opuesto a la legalidad.
En declaraciones a este diario, la portavoz socialista, Carmen Andrés, justificó la abstención del PSC alegando que el texto finalmente aprobado «rebaja la pretensión inicial del grupo de ERC», y alude de manera particular a los nombres relacionados con la «simbología monárquica puestos durante la dictadura franquista» (Sólo un 20% de los catalanes cree que el proceso de Artur Mas acabará en la independencia).
«Somos muy respetuosos con la legalidad y por eso criticamos la retirada del busto, y tampoco nos gusta que el «nomenclator» de la ciudad, hasta ahora fruto del consenso, sea elemento de confrontación política. Una cosa es revisar toda alusión monárquica porque sí, y otra estudiar los nombres que se pusieron durante el franquismo».
Indulto para la calle Ferran
Entre las calles y plazas que se revisarán están vías tan significativas como el paseo Joan de Borbó -cuyo nombre se cambió durante la alcaldía de Pasqual Maragall- la avenida María Cristina o la céntrica plaza Joan Carles I (Artur Mas emigrará a Canadá si no logra ser president tras las elecciones del 27S).
El paseo Isabel II, la calle Alfons XIII, la avenida Príncep d’Astúries, el muelle Príncep d’Espanya y la calle Reina Victòria también se revisarán. Por contra, y fruto del acuerdo entre ERC y BComú, se indultan la calle Ferran y la calle Princesa.
El líder municipal de ERC, Alfred Bosch, señaló que su objetivo es que no haya en la ciudad «ningún reconocimiento a una dinastía impuesta por las armas y perpetuada por dictaduras», y aseguró que la propuesta no va en contra de España ni de los españoles, sino de la monarquía.
