En este inicio de curso político, después de transcurridos los primeros cien días de gobierno de Guillermo Fernández Vara, el PP se está caracterizando por querer desgastar al PSOE con el incendio producido el 6 de agosto en la Sierra de Gata.
Comienza a ser un tanto redundante el manido argumento de la culpa del incendio fue de los socialistas, como se encargó de certificar, en unas declaraciones públicas en la ciudad de Cáceres, el líder de la oposición y cada día peor valorado por los extremeños y extremeñas, José Antonio Monago.
Monago aseguró que «a ellos (los socialistas) se les han quemado 9000has». Lo dijo mientras reconocía que el derrumbe de los techos de los hospitales, no eran ocurrencias del Consejero Vergeles, sino consecuencia del abandono que habían sufrido tras su mala gestión sanitaria en la región.
El PP exige permanentemente al gobierno socialista en la Junta de Extremadura, que ya habilitó 5 millones de € para realizar los trabajos del post incendio, pero parece actuar como fiel escudero de Rajoy en Extremadura, cuando pasados casi 3 meses del incendio el gobierno de España aún no ha aprobado un Real Decreto Ley de ayudas.
El PP intenta desgastar ahora la gestión de los trabajos de limpieza de las zonas quemadas para evitar la erosión de las 7.832has en las zonas de mayor pendiente y en las riberas de los ríos y arroyos. Pretenden hacerlo además sin atender al más mínimo argumento serio, técnico y científico que demuestre sus aseveraciones, delatando su verdadera intención, ya que además antes deberían conocer si es responsabilidad de la Junta o de la Confederación.
Es materialmente imposible, técnicamente, evitar que tras un devastador incendio como el ocurrido en la Sierra de Gata pueda evitarse que el agua de lluvia otoñal se tiña de negro, que arrastre la ceniza, lo que sí se puede evitar es la pérdida de suelo y para ello la Junta de Extremadura está realizando un magnífico trabajo con la construcción de gaviones en los cauces de los arroyos y vaguadas, al mismo tiempo que se crean fajinas siguiendo las curvas de nivel para evitar la escorrentía.
Todos los estudios realizados advierten de las dificultades encontradas para evitar la erosión del suelo tras un incendio, las técnicas de aplicación de mulch han sido las más eficaces, pero tienen el inconveniente de su alto coste y riesgo de introducción de semillas de plantas no deseadas. Las medidas más utilizadas son la realización de fajinas que son eficaces para detener la erosión de las primeras lluvias, especialmente las tormentosas, pero pierden eficacia en las laderas convergentes y con altas pendientes.
Que el PP exija a Guillermo Fernández Vara, cuando no exige a Rajoy que es el que tiene la capacidad de aprobar un Real Decreto Ley de ayudas para los habitantes afectados por el incendio en la Sierra de Gata, como ha sido la tónica habitual en todos los territorios donde se han producido catástrofes, evidencia su indolencia y su trato desigual para con los Extremeños, que debemos tener el mismo trato que el resto de conciudadanos de este país.
Por ello, olvidan que cuando en 2003 estaban en la oposición y se produjeron grandes incendios en las Hurdes y Valencia de Alcántara, su crítica era al modelo forestal extremeño y a la falta de prevención, «su lema era los fuegos se apagan en invierno». Ahora deberíamos preguntarnos cuál fue la política forestal y de prevención del PP en estos últimos 4 años.
La política forestal que ahora defiende la Junta es la que gracias a un convenio con la Universidad de Extremadura está poniendo las bases de un nuevo modelo forestal, con unas repoblaciones con especies autóctonas, frondosas, en mosaico y con un diseño participativo de las actuaciones de restauración, para conseguir la complicidad e implicación de los vecinos y vecinas de la Sierra de Gata.
El PP después de mucho mentir, reconoció en boca de Monago que dejó abandonado los hospitales extremeños…, cerraron urgencias rurales, suprimieron rutas de transporte escolar, han dejado quebrada social y económicamente la región pues ya se ha conocido la desastrosa herencia de 4000 millones de € de deuda del gobierno de Monago ¿dejaron abandonados también los bosques y montes extremeños?