El de 2018 es el mayor aumento del paro registrado para un mes desde 2011. Los datos son esclarecedores: el número de parados registrados ha subido en 47.047 personas en relación con el mes anterior. Y se han destruido 203.000 empleos.
Es el peor dato desde el fin de la recesión, situándose el total de parados en 3.182.068 personas.
Agosto siempre ha sido tradicionalmente un mal mes para el empleo, por la finalización de la temporada veraniega, pero las alarmas se han vuelto a encender.
Tras una legislatura, la de Mariano Rajoy, donde a pesar de los escándalos de corrupción y vaivenes judiciales la población se había acostumbrado a una reducción del paro, ahora observa como con la llegada de Pedro Sánchez a La Moncloa la situación puede revertirse a peor.
Y mientras estos datos vuelven a vislumbrar un mal futuro económico, el gobierno a lo suyo,a exhumar el cadáver de Franco.
