Las primeras palabras de Oriol Junqueras en el juicio del procés fueron así: buenismo, victimismo y negación a las preguntas de VOX.
«Para mí es un placer hablar en castellano porque así me podré dirigir al conjunto de la ciudadanía española, después de año y medio sin poder expresarme», ha explicado. «Se me acusa por mis ideas y no por mis hechos. Me considero un preso político», ha respondido a su defensa.
Poco después, en cuanto pudo, se puso gallito a voces diciendo que ellos no han cometido ningú delito.