(PD/Agencia EFE).- La denuncia del padre de un menor de Sabadell (Barcelona), supuestamente víctima de «grooming», obtención de imágenes sexuales de menores a través de programas de «chat» en Internet, ha desembocado en un detenido en Oviedo y un imputado en Valencia por delito de pornografía infantil a través de Internet.
La detención se ha producido en una operación de agentes de la unidad de delitos informáticos de la Policía de la Generalitat de Catalunya, en colaboración con el grupo de Delitos Telemáticos de la Guardia Civil, según han informado hoy los Mossos.
Un detenido en Oviedo y otro otro en Valencia
La operación se saldó con la detención de Máximo G.G., de 41 años de edad y vecino de Oviedo y la imputación de David M.F., de 21 años de edad y residente en Valencia, por un delito de corrupción de menores y posesión y distribución de pornografía infantil.
En un ordenador del detenido, que tras pasar a disposición judicial quedó en libertad con cargos, la Policía halló un total 6.738 archivos de pornografía infantil de menores de entre 10 y 16 años.
Los investigadores hallaron imágenes de genitales de jóvenes capturadas a partir de la práctica de «grooming».
David M.F., la persona imputada en Valencia, resultó ser un joven que realizaba esa actividad como entretenimiento y en su ordenador se encontraron imágenes obtenidas a través de esa práctica delictiva que están siendo analizadas para esclarecer las víctimas implicadas.
Se hacían pasar por menores en el chat
La actividad delictiva conocida con el nombre de «grooming» consiste en que personas mayores de edad se hacen pasar por menores o jóvenes al contactar con menores a través de programas de conversación, básicamente el MSN Messenger.
Los programas de mensajería permiten mantener una conversación mediante texto, audio y vídeo y, una vez obtenida la confianza del menor, el interlocutor intenta obtener imágenes de claro contenido sexual y pornográfico que posteriormente utiliza para coaccionar a la víctima y evitar que la relación telemática se corte.
Los menores son el colectivo que más utiliza las herramientas informáticas que permiten una comunicación directa entre usuarios por lo que la Policía recomienda a los padres que «para evitar esas actuaciones delictivas se interesen por el uso de la red que hacen sus hijos y que se esfuercen en hablar con ellos sobre el tema».
