La crisis económica mundial se cebó con la pequeña y la mediana empresa y, por extensión, con el empleo. Hoy ya se habla de ciclo favorable, pero también se cataloga como lenta agonía el proceso que están sufriendo los comercios autónomos y las micropymes. Y es un fenómeno global.
En Reino Unido, según datos recogidos por Telegraph, en los ocho primeros meses de 2018 desaparecieron 1.100 comercios. En España, el INE recogió que, a principios de enero del año pasado, había registradas 10.970 empresas del comercio minorista menos que dos años antes. La liquidación de establecimientos de proximidad, además, fue el doble que en los últimos tres años.
No es solo una cuestión de economía, sino de cómo la compraventa de productos y servicios a través de la Red ha perfilado los nuevos hábitos y de consumo. Y gigantes como Amazon o AliExpress han revolucionado un sector que deja ya muchas víctimas a sus espaldas, de manera que en Estados Unidos se habla de “apocalipsis del retail”.
Porque seamos realistas. Aunque se nos llene la boca con la necesidad de apoyar el comercio local, todos hemos recurrido en alguna ocasión a los grandes portales: hay más variedad, precios más competitivos y, sobre todo, comodidad. Tan fácil como pedirlo, pagarlo y recibirlo en casa en poco tiempo.
Analítica digital para vender más
Los nuevos hábitos y la enorme competencia que generan los gigantes tecnológicos, obligan a tomar una actitud proactiva si una empresa quiere sobrevivir. Puede que hace unos años emprender en Internet fuera una oportunidad, pero ahora se revela como una necesidad para sobrevivir.
Es aquí donde se torna fundamental rodearse de profesionales que sean capaces de asesorar, ayudar en la elaboración y el desarrollo de una hoja de ruta que mantenga la viabilidad de la empresa. Arimetrics, por ejemplo, es una empresa española con proyección internacional que ha optado por la especialización en la rama de la analitica digital, centrándose en la mejora de los procesos de conversión.
Para los no duchos en términos técnicos, ¿qué significa esto? La conversión es el proceso que guía al visitante al espacio digital de una empresa, como su web, para que acometa una acción concreta. Puede tratarse de la suscripción a una lista de correos electrónicos, la participación en una encuesta o, por supuesto, la compra de sus productos y servicios. Y todo ello sin perder la perspectiva del objetivo principal de la empresa, vender para sobrevivir.
Dado que lo que no se puede medir no se puede mejorar, la analítica digital es clave para conocer a los visitantes de una web. Solo detectando los puntos débiles de una web se puede saber por dónde empezar a mejorar y definir toda la estrategia online de la empresa.
Otras mejoras en el ámbito digital
Pero antes de la conversión de visitantes en usuarios habituales y clientes, es necesario captar público y retenerlo. Por eso las empresas de marketing digital ofrecen soluciones encaminadas a adquirir tráfico cualificado, hacer análisis avanzados, captar, convertir, visualizar e integrar datos. Todo un proceso de ingeniería que ofrece resultados medibles a las empresas.
Son muchas las acciones que se pueden acometer digitalmente para la mejora de resultados, pero cualquier proceso comienza por medir, por hacer un diagnóstico correcto de la situación actual y elaborar una estrategia con la que impulsar el crecimiento online.
Los servicios de analítica web responden preguntas y ayudan a buscar soluciones: ¿se ofrece información en cantidad y calidad suficiente? ¿Se aplican técnicas de posicionamiento en buscadores? ¿Hay presencia en medios de comunicación social? Y así hasta identificar problemas y oportunidades.
El marketing, una inversión
La estrategia y el marketing digital, la analítica web, el diseño de dashboards para la visualización de datos, el posicionamiento en buscadores… El marketing digital engloba herramientas y procedimientos que, para repercutir de manera efectiva en los resultados, tienen que ser gestionados por profesionales.
Hace mucho que pasó el tiempo de pedirle a alguien de la empresa o cercano a ella, pero completamente ajeno al mundo del marketing, que abriera unos cuantos perfiles en redes o un blog para ir actualizando información: promociones, rebajas, novedades, etc. Ciertos tonos y formas al generar contenido han tenido un efecto, cuanto menos, adverso.
El marketing online ha experimentado un crecimiento continuo desde sus inicios y, sobre todo, desde su popularización. Y eso indica que muchas empresas no lo ven como un gasto más, sino como una inversión necesaria para el crecimiento.
Para sacar provecho del marketing digital hay que empezar por elegir bien, ya que a veces no es sencillo distinguir a las agencias profesionales de los gurús y vendehumos . Dar con una agencia de calidad contrastada, solvencia y sobre todo profesionalidad es una decisión estratégica que debe ser tomada con parámetros profesionales. Por ello, a la hora de elegir una agencia digital es recomendable siempre analizar sus web, su aviso legal, los testimonios de clientes y las marcas con la que han trabajado.
En definitiva, la correcta transformación digital de una empresa en pos de su supervivencia exige la formación de equipos profesionales a nivel interno, pero también la correcta elección de proveedores expertos y de confianza que aseguren los mejores resultados. Y en este sentido, confiar en una agencia especializada y con sobrada experiencia en estrategias online es una garantía de éxito.