Los suecos, con esto del frío, tienen mucho tiempo para inventar y ahora acaban de crear un ataúd con música para los difuntos. Parece evidente que el significado de las dos palabras ‘silencio sepulcral’, podría tener sus días contados debido a la creación de un ataúd musical.
Obra de una compañía sueca, la caja tiene integrado un sistema de sonido que sus creadores han bautizado como «catacumba» con altavoces potentes.
El ataúd cuenta además con una lápida especial con WiFi, a través de la cual los familiares y amigos del difunto pueden elegir las canciones que quieren poner a través de un ordenador.
Sus creadores aseguran que son conscientes de que están rompiendo un «tabu» y que aunque saben que no son nada baratos, ya que superan los treinta mil dólares, los féretros ya tienen una cierta demanda.
Además de Suecia, países como Estados Unidos, Japón, Canadá o Taiwan, ya han mostrado su interés por estos peculiares ataudes.
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