Es el nuevo salto que está a punto de dar la industria de los drones.
Son robots minúsculos que podrán inspeccionar el crecimiento de los cultivos, detectar fugas de gas y adentrarse por lugares a los que los grandes drones no llegan.
Según informa la web Techxplore.com, estos robots son tan pequeños que usan alas en lugar de hélices.
También por su tamaño, el reto al que se enfrentan sus diseñadores es desarrollar un electrónica suficientemente ligera para que no les arrastre el suelo.
De este modo, ingenieros de la Universidad de Washington trabajan en esta solución dotando a al denominado RoboFly de un cerebro muy ligero basado en tecnología de rayo láser.
Según explican en el mencionado portal:
RoboFly es un poco más pesado que un mondadientes y funciona con un rayo láser. Utiliza un pequeño circuito a bordo que convierte la energía del láser en suficiente electricidad para operar sus alas.
Sawyer Fuller, profesor asistente en el Departamento de Ingeniería Mecánica de la Universidad de Washington, señaló que
Antes, el concepto de los robots voladores del tamaño de un insecto inalámbrico era ciencia ficción. Nuestro nuevo RoboFly inalámbrico muestra que están mucho más cerca de hacerse reales.