No es necesario que el usuario programe
Durante el primer fin de semana de 2017 ha tenido lugar el CES de Las Vegas, una feria tecnológica en la que no sólo las grandes marcas aprovechan para mostrar los últimos gadgets de su catálogo. Uno de los mercados destacados de la feria será el internet de las cosas (iot), objetos de uso cotidiano logran mejorar su uso gracias a su conexión.
Ejemplo de esta explosión de objetos inteligentes conectados es la 360 Smart Bed, una cama inteligente desarrollado por Sleep number capaz de mejorar el sueño de la persona gracias funciones como ajustar la postura mientras duerme o calentar la cama para nunca tener los pies fríos, según recoge El Economista hoy 4 de enero de 2017.
La cama inteligente está conectada con una aplicación que permite al usuario conocer sus hábitos de sueño, con lo que con el tiempo, y gracias a los datos recabados, el descanso podrá irse mejorando. Asimismo, la aplicación puede conectarse con los sistemas de calefacción inteligentes Nest o las pulseras de actividad Fitbit para poder ajustar la temperatura y saber optimizar el colchón o la alarma en función de las necesidades de descanso por la actividad física realizada.
Y es que entre las funciones con las que cuenta la 360 Smart Bed están la regulación del colchón en tiempo real con la función ‘ResponsiveAir’. Lo hace gracias a que cuenta con dos grandes bolsas de aire que se ajustan en función de la postura de la persona para colocar de forma óptima partes sensibles a la hora de descansar como la espalda, el estómago, el cuello e incluso repartir el peso entre la pareja que comparta colchón.
Además, la cama inteligente también es capaz de detectar si la persona está roncando. En ese caso la base eleva automáticamente la parte de la cabeza del roncador siete grados para ayudar a aliviar temporalmente los síntomas de ronquidos comunes y suaves en adultos sanos.
Pies calientes para dormir mejor
Sin embargo, una de las funciones más llamativas de la cama es la posibilidad de calentar la parte inferior del colchón antes de que el usuario se acueste. La compañía defiende que si el usuario se encuentra con una cama confortable cuando se mete en ella es capaz de dormirse más rápido y descansar más.
No es necesario que el usuario programe o establezca cuándo comenzar a calentar la cama, y es que gracias al uso de la aplicación, la propia Smart Bed conoce la rutina de cada persona y sabe en qué momento suele acostarse.
Asimismo, también sabe cuándo suele levantarse. Aunque el usuario puede establecer cuándo quiere que la cama le despierte, ésta será capaz de detectar cuándo tiene el estado de sueño más ligero cerca de la hora de madrugar y será entonces cuando la Smart Bed le despertará.
De momento la compañía no ha determinado cuándo se podrá comprar ni cuánto costará exactamente esta cama inteligente. Eso sí, esta previsto que las primeras unidades empiecen a estar disponibles a lo largo de este año y el precio ronde entre los 800 y los 7.000 dólares, dado que en esta horquilla oscilan -en función del tamaño- sus modelos actuales.
