Han echado un pesado manto de silencio sobre el asunto, pero algo huele a podrido en Twitter.
Y no sólo porque la red social del pajarito cierre a toda prisa cuentas como la VOX en Cataluña, por recoger datos sobre la deliencuencia y los MENAS magrebíes, y ni pesteñee cuando un desaforado Echenique, portavoz de Podemos, anima a los saqueadores haselianos a atacar a la Policía o Pilar Rahola aplude el apedreamiento de ciudadanos que asisten a mítines de VOX.
El pasado 8 de enero, después de varias advertencias y días después del asalto al Capitolio, la red social Twitter cerraba la cuenta del aún presidente norteamericano ante el riesgo de que éste incitara a la violencia. Eso dijeron los magnates de Silicon Valley.
El pasado 17 de febrero, mientras los violentos destrozaban el mobiliario urbano en Madrid, Barcelona y Granada, el portavoz de Unidas Podemos en el Congreso, Pablo Echenique, alentaba la algarada con un mensaje en la misma red social:
“Todo mi apoyo a los jóvenes antifascistas que están pidiendo justicia y libertad de expresión en las calles. Ayer en Barcelona, hoy en la Puerta del Sol”.
Pese a que el delincuescente tuit fue denunciando siguiendo las normas de la propia red social por centenares de ciudadanos; pese al escándalo desatado que llevó al día siguiente a la vicepresidenta Carmen Calvo a desautorizar a Echenique; pese a que los sindicatos policiales van a llevar el mensajito de marras ante la Justicia… Twitter no adoptó medida alguna.
En mitad de la creciente controversia por la errática y arbitraria política de Twitter en la regulación de los contenidos de sus usuarios, aplicando una abierta censura en muchos casos, su responsable en España, Nathalie Picquot, ha decidido abandonar el barco. Y eso no hace más que avivar la polémica en torno al recorte de libertades en la red social del pajarito.
«Después de tres años al frente de Twitter España he decidido dar un giro a mi vida profesional y dejaré la empresa en breve», ha anunciado Picquot en su cuenta oficial en la red social.
Asimismo, la directiva resalta sus «ganas de empezar una nueva etapa» en su carrera con nuevos aprendizajes y retos distintos y se muestra «muy agradecida y orgullosa de haber liderado este gran equipo».
Aunque Picquot no ha querido dar más detalles en los motivos de su dimisión, tal y como informan varios medios, entre ellos El Mundo, parece lleva tiempo sin estar de acuerdo con las decisiones que está tomando la matriz de la compañía, sobre todo, en lo que a la censura de mensajes y perfiles se refiere.
Las mismas fuentes aseguran que está «afectada, personal y profesionalmente, por la arbitrariedad de la matriz norteamericana a la hora de publicar o censurar determinados tuits».
Desde hace unos meses, la censura de Twitter con las cuentas que no se ajustan a determinado corte progresista se han acrecentado.
En otro comunicado, la compañía ha informado de que están «enormemente agradecidos» a Nathalie Picquot por sus contribuciones a Twitter en España en los últimos tres años y le desean todo lo mejor. Asimismo, la empresa anuncia que iniciará «de inmediato» la búsqueda de un sustituto para su puesto, a la vez que confía en el «sólido equipo de Twitter España para continuar el excelente trabajo y servicio» que la empresa da a socios y clientes.
Consejera en Sanitas
Picquot asumió la Dirección General de Twitter para España y Portugal en noviembre de 2017 en sustitución de Pepe López de Ayala, quien había sido nombrado director general de Twitter para los mercados de habla hispana de Latinoamérica. Antes de sumarse a Twitter, trabajó durante once años en Google España donde ocupó diversos cargos, entre ellos, directora de agencias, vídeo y branding; responsable del área de branding o directora de desarrollo de partnerships estratégicos.
Picquot se ha incorporado hace pocas semanas como consejera independiente a la cúpula de Sanitas, un puesto que ya desempeñó en MásMovil entre marzo de 2019 y septiembre de 2020, cuando se conoció el resultado de la Oferta Pública de Adquisición (OPA) lanzada por los fondos KKR, Cinven y Providence por el operador de telecomunicaciones.