La mayoría de usuarios de Twitter ha visto cómo su cifra de seguidores se ha reducido en los últimos días una media aproximada del 6%.
Esto no implica que la red social haya decidido bloquear cuentas en masa, sino que por primera vez ha hecho limpieza para que las cifras de seguimiento reflejen la realidad y no sean fruto de la compra-venta de seguidores. Suele ocurrir con los famosos.
Durante años, Twitter ha ido congelando cuentas con un perfil determinado. Se trata de personas que empezaron a tuitear y que, con el tiempo, empezaron a tener comportamientos extraños, como seguir a muchas cuentas a la vez. Esto pudo deberse a hackeo o a cesiones de la cuenta con propósitos políticos.
La red social inició una limpieza el jueves pasado. Entre los políticos más relevantes que han perdido una cantidad significativa de followers figura a la cabeza Pablo Iglesias, con una disminución de 80.000 seguidores.
El líder de Podemos ha pasado de 2,31 millones a 2,23 millones de followers, según recoge Claudia Marqués en El Español.
El segundo al que más seguidores falsos le han quitado es el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, (10.000), los mismos que le han restado a Albert Rivera. Les sigue la ex vicepresidenta y candidata a liderar el PP, Soraya Sáenz de Santamaría, con una disminución de 4.000 seguidores.
La cifra más repetida de pérdida de followers entre los políticos españoles es mil. Son los que les han restado a Inés Arrimadas, Irene Montero, Gabriel Rufián, Carles Puigdemont y la presidenta andaluza, Susana Díaz.
