Rafael Lozano (Presidente del foro de la familia) y Javier Gómez (portavoz del grupo de gays y lesbianas del PP) fueron invitados al programa ’59 segundos’.
Resulto agradable y sorprendente descubrir cómo dentro de las filas del PP también hay quien apoya la causa y en este caso en primera persona. El señor Gómez se casará con su pareja de siempre y según confeso él “Me caso y será por amor”.
En el otro bando, Rafael Lozano, el Presidente del foro de la familia, se quedó aislado en sus argumentos. Los periodistas que allí estaban, Pedro Jota entre los más derechones, estaban a favor de la unión entre homosexuales.
El director del Mundo simpatizó más con el señor Gómez al decir que la palabra matrimonio no hubiese sido necesaria.
A modo de encerrona o de venganza por la manifestación de hace un año, los de Globomedia emitieron un vídeo en el que se mostraba la vida de los dos primeros hombres en casarse en España.
Los protagonistas acudieron al plató y Mamen los dio la palabra. Uno de ellos se encaró con el Presidente del foro y directamente le preguntó:
“No entiendo cómo puedes decir que yo le he quitado a él un derecho. Yo no le he quitado nada a nadie. ¿A ti te molesta que nos queramos?, ¿qué seamos felices así?»
Rafael Lozano:
«Yo me alegro mucho de que seáis felices pero para eso no se tiene que modificar una ley.»
Carlos, que así se llamaba el invitado, le recordó:
«La ley sigue siendo la misma para vosotros pero se ha ampliado a nosotros. Nada más. ¿A ti te parece mal que si yo muero mi pareja herede?, o que si él muere… ¿herede yo?».
Lozano:
«No me parece mal, pero con esta ley va a haber perjudicados. Son los niños».
Javier Gómez intervino enseguida haciendo referencia a dos estudios oficiales que certifican que para nada estos niños saldrán damnificados al ser adoptados por parejas homosexuales.
El debate ya estaba en su conclusión, ya no dio tiempo a afrontar el tema de la adopción en profundidad. Los periodistas coincidieron en que la ley no dará marcha atrás, ni por el recurso interpuesto de anticonstitucionalidad, ni siquiera cuando el PP llegue al gobierno en X años.
Lo que les faltó decir a los del programa es que los matrimonios entre homosexuales ya existían con Franco. ¡Cuántas parejas se habrán casado siendo él gay o lesbiana ella! Por guardar las formas, por no liarla, por conveniencia. Ocultos, en la sombra. Mintiéndose.
Con la ampliación de la ley sólo se han casado 1500 parejas. Con el caudillo, impulsor del matrimonio, hubo más uniones entre homosexuales de las que hay ahora. Ahora la mayoría de los gays pasan de casarse y los que han estado casados se divorcian.
Lo que se ha equiparado desde hace un año son las uniones entre miembros del mismo sexo. Es decir, que ahora se apuesta por la autenticidad, transparencia, y se entierra de una vez la hipocresía, el miedo y la fachada.
La segunda cosa que faltó decir, amen de los estudios que demuestran que lo del ser gay no se pega como la gripe, es que lo perjudicial para los niños no es vivir con dos papás o dos mamás. Lo malo para un niño es ver cómo en su casa hay violencia, gritos, desamor, intolerancia, incultura, miedo y represión. Esta es la enfermedad de todos los padres que, por ejemplo, apuestan para que Polaino trate de curar a sus hijos.
Respecto al miedo de las posibles humillaciones que puedan sufrir los niños, es obvio lo que hay que contestar. En el colegio tendrá que pasar como en la vida real. Lo hay que erradicar es la intolerancia y el racismo y no a los padres de los niños que tienen una orientación sexual o un color de piel distinto.
Esta ley está educando a gran parte de la sociedad que, hasta ahora, nunca reflexionó sobre el horrible nombre que tenían las cosas que pensaba.
