(PD).- El presentador de «Aquí hay tomate» se hizo el ofendido, dijo estar muy enfadado por los insultos que recibe por ser homosexual y repartió estopa a mansalva. Todo ello durante la emisión de La Noria, en Telecinco, donde habló sobre el vídeo donde aparece borracho durante la pasada edición del Día del Orgullo Gay.
El siempre dicharachero Jorge Javier pasó por los estudios de «La Noria» y, fiel a su estilo, dejó entrever que «en mi productora, los jefes no abusan de sus empleadas como en otras».
En respuesta a las críticas de compañeros de la profesión afirmó:
«trabajo en una empresa en la que los jefes no dan cocaína a sus empleados cuando están cansados».
Y se quedó tan fresco.
Repitió hasta la saciedad en el programa, que se siente «criticado» por su condición sexua y no por su «trabajo»:
«De un tiempo a esta parte sufro constantes ataques hacia mi persona»
.
Reconoció que algo ha influido su comportamiento durante la última edición del Día del Orgullo Gay en el que las cámaras mostraron su faceta «más informal», eufemismo que empleo para decir «desmadrada».
Explico que llevaba «un pedo que ni Alfredo»:
«Quiero dejar claro que deseaba que llegase ese día, pero posteriormente se dijeron de mí cosas muy duras».
Afirma que si se atreve a ver el vídeo en el Youtube.
No se ve sin Carmen
Dice que al principio de trabajar juntos, hace ya cinco años, su compañera Carmen Alcayde y él no se hablaban:
«Hoy todo ha cambiado, es una persona importante para mí, hasta el punto que no me veo trabajando sin ella».
El peculiar presentador señaló que el programa que presenta de lunes a viernes, con grandes cotas de éxito, «ha cometido fallos», reconociendo que «ha sido duro con varias personas» pero que también han criticado duramente a «Aquí no hay tomate».
REBENCAZO A MARTÍN PRIETO
Con carita de «yo no he sido», Jorge Javier aprovecho el programa para intentar ajustar cuentas con algunos de los que han criticado el tipo de programas como Aquí hya Tomate.
En referencia a Martín Prieto, columnista de El Mundo, dijo:
«Es el mismo que una vez desapareció de una tertulia de Luis del Olmo por estar de copas con una amante mientras su mujer creía que lo había secuestrado ETA».
Y después se quejan.
