(PD).- Dos de las orejas han sido las de Francisco Hernado, alias «El Pocero» y las otras dos las de Mariano Rajoy. Si la semana pasada María Teresa Campos estrenaba el renovado programa La mirada crítica sentando en el plató a Zapatero, este lunes la otra presentadora estrella de Telecinco, Ana Rosa Quintana, inició la quinta temporada de su programa con ración doble: primero y para abrir boca el constructor más polémico de España y después, como remate, el líder de la oposición.
El líder del PP acudió a los estudios de la cadena de Fuencarral después de presidir una reunión con alcaldes de su partido y durante casi media hora conversó con la popular presentadora de la crisis económica, la nueva Ley del Aborto, la Justicia o la renovación del Consejo General del Poder Judicial.
Quiso Ana Rosa estrenarse con una exclusiva y punto estuvo de sacarle al líder de los populares quién será su candidato número uno en la lista a las elecciones europeas, que se celebrarán en 2009.
Rajoy no soltó prenda y se limitó a decir que aún no han «cerrado» ese asunto y que de momento no ha hablado con Jaime Mayor Oreja, quien fuera cabeza de lista en la pasada convocatoria.
Eso sí, alabó la labor desempeñada por el político vasco, que «ha dado muchas batallas», y reconoció que sería «un extraordinario candidato». Y eso es una pista clara.
Tres recetas para la crisis
Muy gusto -porque el viento sopla a su favor- se movió el presidente del PP hablando de la crisis económica. Rajoy enumeró las tres medidas que, a su juicio, Zapatero debería tomar cuanto antes: poner en marcha un plan de austeridad en las administraciones públicas, bajar los impuestos a las pymes y ayudar a los españoles que llevan a su espalda créditos hipotecarios. En su opinión, reducir las cargas fiscales de las pequeñas y medianas empresas las anima a invertir, lo que crea puestos de trabajo.
Dada la crisis en la que quedó sumido el PP tras perder las elecciones generales, Ana Rosa preguntó a su presidente si el curso político empezada «en calma».
Rajoy señaló que su partido está ahora «muy bien» y dijo sentirse «muy contento y orgulloso» del equipo que formó tras el Congreso Nacional de Valencia, con la secretaria general, María Dolores de Cospedal, a la cabeza.
Un último trago le quedaba a Mariano Rajoy antes de que su entrevistadora le despidiera dándole las gracias por acudir al primer programa del curso: el del Congreso del PP de Madrid, que se celebrará los días 19 y 20 de septiembre.
Ana Rosa se interesó por las relaciones que actualmente mantiene con su presidenta, Esperanza Aguirre, y éste contestó que están «muy bien», aunque reconoció que en el pasado hubo «un momento de discrepancia». Para demostrar que las aguas han vuelto a su cauce, Rajoy adelantó que estará en la clausura del cónclave de los populares madrileños y que pronunciará un discurso que «va a gustar mucho».
