(PD).- Si no les gustan sus principios, Ramoncín tiene otros. Los tiene para todos los gustos. «El Rey del Pollo Frito» ya es parte del jurado de la séptima edición del famoso concurso después de firmar hace siete años un manifiesto contra el programa. De boicoteador a jurado, José Ramón Julio Martínez Márquez no ha dudado en hacer caja al lado de Risto Mejide y Noemí Galera.
En 2002, Ramoncín apoyó una plataforma que se posicionaba totalmente en contra de «OT». Bajo el título «Otro timo no», la asociación de Periodistas Especializados en Música, Ocio y Cultura (PEMOC) y más de un centenar de artistas y profesionales, acusaba al concurso de ser la causa de los males que padecía el negocio discográfico por aquel entonces, recuerda ABC.
El tiempo parece que ha hecho olvidar tanto a Getmusic como a José Ramón Julio Martínez Márquez lo sucedido. Pero en las hemerotecas quedará el manifiesto y todo lo que en él se enumeraba.
Manifiesto «Otro timo no»
Dicho texto empezaba con un «cuando todos los ojos están puestos en la piratería, parece que pocos han advertido la presencia de los tiburones», en referencia al exitoso concurso. El manifiesto «Otro timo no», difundido por ciertos críticos musicales, rezaba en una de sus principales iniciativas «Te cambiamos tu disco de OT por uno de verdad», mostrando así su repulsa por los valores musicales y comerciales del concurso.
No obstante, y tal y como publicó El Mundo en su momento, las quejas de la organización encontraron respuesta en Josep María Mainat, de Gestmusic, que contestaba preguntando:
«¿Quién tiene el poder de dictaminar qué es bueno o malo, quién es un artista de verdad y quién no? El suyo es un afán esnob que se comprende conociendo el currículo de estos críticos, elitistas y de la vieja guardia. Se quejan de nuestra utilización de TVE, que pagamos todos: sí, es obvio cuando un programa resulta deficitario, pero cuando gana es un dinero que también nos ahorramos todos. Además, algunos no deberían hablar tan a la ligera: tienen programas minoritarios en la radio pública que se financia con nuestros impuestos».
