El pasado domingo el Maestro Joao sufría un percance mientras hacia una de sus ofrendas cayendo al suelo y haciéndose un profundo corte en una pierna con las ramas secas de un árbol que necesitaba 18 puntos de sutura, según informa Exclusiva Digital.
A su vuelta a la playa, el concursante vidente quiso volver al lugar donde se había producido el accidente para hablar, muy compungido y con lagrimas en los ojos, con el árbol:
«Hola árbol. Gracias por recoger el ritual para que vengan nuestras personas a vernos. Siempre me quitáis toda la mala energía. No sé si hice algo que te molestó cuando he venido por las noches. Árbol, espero que crezcas fuerte, que cumplas mi ritual y que lo siento. No ha sido culpa tuya, ha sido culpa mía».