Kiko Hernández quiso demostrarle a su jefe todo su cariño. Por eso el ex de Gran Hermano le regaló a Jorge Javier un espantoso plato de cerámica, recuerdo vacacional.
En vez de ser educado y agradecer el presente, el presentador de Sálvame, reconoció que el adorno era tan horrible que lo mejor que se podía hacer con él era romperlo. No sólo romperlo, si no hacerlo en directo. Y así fue.
Jorge Javier Vázquez, autoconvencido de que es el más gracioso y sarcástico, tiró el regalo de Hernández como manda la tradición griega de romper platos.
Kiko se molestó pero, de pronto, se oyeron unos gritos. Una de las esquirlas del plato fue a parar a la pierna de Karmele Marchante. Las cámaras se apresuran a enfocar la herida: un pequeño corte que no paraba de sangrar.
A partir de ese momento, todo fueron exageraciones.
«Aquí hay que ponerle puntos»
decía Rafa Mora.
«Un médico, por favor. ¡Un médico!»
exclamaba Jorge Javier.
Esta es la esencia de Sálvame: Crear dramas dónde no los hay. Karmele, tras ser antendia por los médicos de Telecinco, volvió al plató como si no hubiese pasado nada. Show must go on…
VEA EL VÍDEO: