Sin duda, Mercedes Milá fue lo mejor de la gala 16 de ‘GH14’, pero habría que decirle a la presentadora que lo de machacar a los invitados y lo de enseñar las bragas ya no es necesario. La noche, sin embargo, tuvo grandes momentos, como la entrada de la mismísima Milá en la Casa de Guadalix o la nominación que, por primera vez en la historia, hizo la audiencia.
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Mercedes Milá vuelve a despelotarse en GH para arañar más audiencia
En GH compiten en pechotes: «Miriam, tienes un escote que pareces yo»
El problema es que alargaron demasiado ciertas situaciones y llegó a cansar.
Yo no enseño las bragas para levantar la audiencia porque audiencia ya tenemos, lo digo para los críticos de GH.
Así se despidió Mercedes Milá de la gala 16 de GH14, emitida por Telecinco el pasado 23 de mayo de 2013. Efectivamente, un par de horas antes, la presentadora se había subido la falda a petición de una ex concursante- Noemí Merino- repitiendo, una vez más, el striptease que protagonizó hace ya unos meses en el mismo plató.
Puede que las bragas de la catalana fuesen noticia hace tiempo pero es que, hoy por hoy, ya estamos acostumbrados. No, querida Mercedes, tu ropa interior no levanta el share. Ojalá eso fuera suficiente. Y es que, la presentadora no puede olvidar que la decimocuarta edición de Gran Hermano, es la menos vista de la historia con un 18,5 % de media frente al 20,5% del año pasado o al 30,8% de 2011. Esto no significa, ni mucho menos, que el reality por antonomasia de T5 sea un fracaso (ya le gustaría al resto de programas hacer esos datos) pero dentro de su evolución, sí que se nota una bajada considerable.
Tampoco hay que decir que ‘GH’ es un formato quemado. Para nada. El reality sigue creando modas y ha evolucionado con el tiempo, lo que pasa, (y lo repetiré una y mil veces) es que este año el casting ha sido de una torpeza abrumadora. Tan sosos son los concursantes, y tan poco interesantes son sus tramas, que el concurso está haciendo piruetas para que la cosa se anime (bragas de la Milá incluídas).
Y tras una semanas de descontrol absoluto (en ocasiones pasó de la agresividad más extrema a la sosería más aburrida), Mercedes Milá, despelotes aparte, volvió a ser la de siempre en la gala 16. Estuvo encantadora, cercana, cañera e imprevisible.
Fue la periodista la encargada de darnos varios de los mejores momentos de la noche. Para empezar, su encontronazo con la ya mencionada Noemí Merino. Lo de éstas de viene de lejos. Merino, exconcursante de Gh12+1, se enfrentó en directo con la Milá en varias ocasiones (una de ellas terminó con la madre de la participante sacando a su hija del plató entre lágrimas) y entre ambas siempre ha existido cierta tensión.
El caso es que Milá se pasó la primera parte de la noche lanzándole pullitas a la canaria hasta que la otra se las devolvió en plan luchas de cuchillos ( y todo por la ajetreada vida sexual de Noemí). El caso es que , al final, Mercedes le pidió disculpas «de corazón» a la ex concursante y el público se puso en pie aplaudiendo. Eso sí, Merino le preguntó a la presentadora:
¿Las disculpas son de verdad o es por esto (por conseguir los aplausos)?
La Milá aclaró que ella jamás hace nada para conseguir el favor del público, que todo lo que le sale, le sale…¿de dónde?… Sí, ‘del bolo’. Nota aclaratoria: Milá volvió a demostrar con esto que, a veces, se comporta como una niña de quince años. No es una crítica, ojo, es parte de su encanto.
Puesto que ya había buen ‘rollito’ con Noemí, la Milá le dijo que ella le enseñaba las bragas cuando en cuanto se lo pidiese y Merino no tardó tres segundos en hacerlo. Mercedes se despelotó y nosotros comprobamos que, tras el régimen, gana más desnuda que vestida.
LA PRUEBA DE LOS MODELOS: GENIALIDAD Y ABURRIMIENTO A PARTES IGUALES
Los concursantes de Gh14 tenían un nuevo reto semana, cada vez que sonaba una música, tenía que desfilar por toda la casa pero cuando el ‘Super’ les indicaba, ellos tenía que posar y no moverse. Así, sin mover una ceja y sin hablar, fueron recibiendo las visitas de gente tan variopinta como ninjas o un grupo de turistas japoneses, todos con la intención de distraerlos y provocarlos. Es decir, que ganaban si conseguían no moverse.
Pero la más grande de las visitas fue, sin duda, la de Mercedes Milá (que sucedió el jueves 23 de mayo por la tarde) , quien, por vez primera, entraba en la casa de Guadalix. El momento fue maravilloso. Los concursantes se quedaron como estatuas y aguantaron la risa mientras que su presentadora les olía, les tocaba o les hacía muecas (maravillosa su escena con ‘pollito volador’ (Álvaro) o con la siempre genial Desi).
La prueba se alargó durante la gala y los concursantes recibieron la visita de una orquesta de bailarines, del payaso diabólico del año pasado y de una invasión zombi. Y aquí estaba el problema. Si bien los momentos estaban bien pensados y mejor realizados, éstos se hacían eternos (lo de los zombies parecía que no iba a acabar nunca) lo que ralentizó el espectáculo.
Pero estuvo bien que se aprovechase la prueba para nominar. Los habitantes de la casa estaban reunidos cuando el ‘Súper les pidió que ‘posaran’. Y así, petrificados, uno a uno fue dando sus nombres ante el resto, que no podía reaccionar (un gran acierto de guión, la verdad).
Las nominaciones fueron más o menos previsibles. Casi todos nominaron a Nacho, primero porque ha sido de los últimos en llegar y segundo porque, por muy alto que sea, pasa desapercibido en esa casa (es típico concursante lastre que debería irse ya). también Igor recibió unos cuantos votos porque, por mucho que haya vuelto con una sonrisa en la boca y peloteando al personal, muchos no olvidan su altercado con Sonia y sus ganas de meter cizaña.
A Nacho y a Igor se le unieron, gracias a Dios, los gemelos Montoya, quienes esta semana han estado especialmente insoportables por culpa de sus ansias por ganar.
Pero las nominaciones del 23 de mayo de 2013 estuvieron marcadas por un hecho histórico. Y es que, por primera vez en la historia, la audiencia, a través de una nueva aplicación para móviles, pudo nominar a un concursante extra.
Y con un 72% de los votos, la quinta candidata a irse es… ¡Sonia!. Y aunque se trate de una de las concursantes más ‘odiadas’ en el exterior y aunque el público estallase en júbilo cuando la nominaron, a un servidor le parece injusto tanto linchamiento.
Desde aquí pido fervientemente que no se la expulsen. Se lo merecen mucho más los gemelos o Igor. Pero ¿qué ha hecho realmente Sonia? Sí, llora por todo, le aterra demasiado ser nominada y puede llegar a agobiar con tanta neurosis pero hasta ahí. No hay que criticarla por no acostarse con Kristian ni por ‘calentarle’ (está en su derecho). Creo que el problema es que él cae mejor fuera y como se ha enamorado, a ella se la lincha. Aún así, el ‘pelocho’ va perdiendo puntos por momentos con esa actitud quejica y cobarde.
SARAY, LA EXPULSADA
Como era de esperar, Saray fue la expulsada de la noche. Y es que claro, qué podemos esperar de una mujer cuyo único punto fuerte de la casa fue la escena de masturbación que protagonizó en el jacuzzi junto a Carlos Montoya.
Obviamente, cuando llegó al plató, no se habló de otra cosa que del jacuzzi, (con bronca con su ex, y la novia de éste, incluída).
Y por lo demás, poco más que decir. Este es el gran problema de Gh14. Que se están empeñando tanto en vendernóslo que no paran de darnos información y las galas son simplemente un resumen largo de lo que ya hemos visto. Y peor se va a poner la cosa la semana que viene con una gala el lunes y otra el jueves.