Tras un exitoso comienzo, ‘Las bodas de ‘Sálvame’ fueron perdiendo fuelle durante las siguientes semanas hasta que el sábado 25 de mayo de 2013, la ex de GH10 y ex reportera de ‘Sálvame’, Almudena Martínez, alias Chiqui, se casó ante el 14,4% de la audiencia. Una audiencia que sin embargo, tuvo que asistir a uno de los shows más chirriantes y horteras que se recuerdan. Mucho brilli-brilli, mucho famoso de segunda, mucho cantante en promoción y una Mercedes Milá cada día más explotada.
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Lo mejor de la boda de Chiqui y Borja: emocionados, nerviosos y muy enamorados
Malas noticias para los anónimos que siempre han soñado con casarse en la tele. Tras 6 semanas de enlaces protagonizados por no-famosos, ha tenido que venir una ex de Gran Hermano para demostrarnos que aquí, lo que triunfa, es lo de siempre, es decir; ver la intimidad de las ‘celebrities’.
El sábado 13 de abril de 2013 se estrenó ‘Las bodas de Sálvame’, una suerte de spin-off del programa-madre de Telecinco, que no era más que el intento barato (y patrocinado, por supuesto) de decirnos que en el cortijo no sólo se pone a parir a la gente sino que , encima, ayuda a los espectadores a ser más felices. Aquel día, la apuesta de largo de Kiko Hernández como presentador, se hizo con un gran 16,4% de share, lo que supuso un dato histórico para las sobremesas de la cadena durante los fines de semana.
Durante las semanas siguientes, ‘Las bodas de Sálvame’ se desplomó, dejando claro que ese era un programa que no ofrecía nada a su público. Ahí no había rastro ni de morbo, ni de sorpresa y, mucho menos, de buen gusto. Pero el 25 de mayo de 2013, se casó, por primera vez, un personaje popular y la cosa cambió, lo que significa que, a partir de ahora, veremos desfilar por el altar del programa a la flor y nata de la cadena y que los pobres anónimos que anhelan su tarta nupcial y su vestidos brillantes se van a quedar con las ganas.
La encargada de remontar el programa no fue otra que Almudena Martínez, más conocida como Chiqui, ex concursante, en primera instancia, de Gran Hermano 10. La ‘pequeña’ pizpireta más conocida del reality, por fin tuvo un golpe de suerte después de años de via-crucis económico y moral.
LA MALA VIDA DE CHIQUI
Lo cierto es que el currículum televisivo de Chiqui siempre ha estado marcado por la mala suerte y por la sospecha. Tras salir de la casa de Guadalix, la murciana ganó el suficiente dinero para poder montar su propio local de copas. Pero la crisis y, dicen, una mala gestión, la hicieron fracasar en su proyecto y la pobre se vio hasta el cuello de deudas. Y de pronto, ‘Sálvame’ acudió al rescate y la ofreció un puesto como reportera ¡política y cultural!
El paso de Chiqui por el cortijo estuvo marcado por el éxito pero también por el misterio. En un primer momento, y aunque su sección era de lo más visto de la cadena, la joven desapareció durante unos meses. Luego reapareció, pero el programa le dio la ‘patada’ aludiendo a la crisis pero contratando inmediatamente después a otros colaboradores (los ex tertulianos de ‘DEC’, por ejemplo).
Chiqui estaba muy mal pero recibió entonces otra buena noticia. Durante la final de ‘Supervivientes 2011’, su amigo Jorge Javier Vázquez, le comunicó que ella sería la primera concursante de la siguiente edición del reality de supervivencia. El problema es que eso nunca sucedió puesto que T5 cerró el grifo y dijo que no a un concurso tan caro como ese
Desde entonces, Chiqui anda dando tumbos. De vez en cuando aparece en el plató de ‘Sálvame’ lamentándose de su suerte y asegurando que tanto su novio, Borja, como ella, viven de la caridad de sus padres porque no tienen dinero.
Pero T5, en plan hada madrina, les ha concedido a la pareja su mayor deseo: No, no hablamos de la boda, sino de la oportunidad de volver a la tele por todo lo alto.
UN PRESENTADOR INSEGURO Y UNOS INVITADOS DE ‘POSTÍN’
La boda de Chiqui fue, desde el comienzo, un despropósito, un espectáculo que deja al enlace de Farruquito a la altura de un festín en la embajada francesa.
Empecemos por el maestro de ceremonias, Kiko Hernández. He de confesar que desde su debut, no le había visto al frente del programa y, visto lo visto, no ha mejorado demasiado. Queda dicho que para un servidor, Hernández es uno de los mejores tertulianos de ‘Sálvame'( incisivo, cañero,morboso y siempre con algo que aportar) pero que como conductor es torpe y suena a forzado. A Kiko no le va el buen rollo y se nota. Se pasa las dos horas ‘obligando’ al personal a ser feliz y sus chistes parecen imitaciones de los de su maestro Jorge Javier.
El plato fuerte de la ceremonia fue, sin duda, la lista invitados. Aquello era un desfile pesadillesco de ex grandes hermanos y portadas de Interviú andantes, vestidos todos con tul, escotes en 3D y con mucho, mucho, mucho maquillaje encima. Y todos ansiosos por volver a salir ante las cámaras y aprovechando la ocasión para promocionar negocios, discos o para, directamente pedir trabajo. Por allí vimos a Iván Madrazo (ganador de Gh10), la (no sé como definirla) cantante-actriz-polemista Malena Gracia, Orlando ex Gh10, Noemí Merino (Gh12+1), Germán (Gh10) Amor(GH9 , Dámaso (Gh12) Pepa Beltrán o el mismísimo actor porno, Dinio
Las damas de honor fueron la ‘pechugona’ (ella se queja pero la verdad es que uno sólo puede verle los pechos cuando la tiene enfrente) ganadora de GH12, Laura Campos y Gisela, compañera de edición de Chiqui.
Y la madrina, como no podía ser de otra manera, fue Mercedes Milá, cada día más presente en todos los programas de T5 (ya estuvo en ‘Las Bodas de Sálvame’ dos semanas antes) y, por lo tanto, cada día menos especial.
Pero, para mí, uno de los grandes momento del programa fue cuando Kiko Hernández le preguntó al novia, quién le gustaría que fuera su padrino y el tal Borja respondió que Jorge Javier, ¡zas, en toda la boca! porque quién apareció fue Jimmy Giménez Arnau quien se limitó a darle un breve consejo:
Nunca os vayáis a la cama enfadados, que antes de ir a dormir limeis recillas y si cae un polvo mejor.
El otro gran protagonista de la boda fue el vestido. Su elección fue un drama explotado por ‘sálvame’ durante semanas. Chiqui andaba desesperaba porque no encontraba el atuendo adecuado pero fue otra ex gran hermana, Marta López, la que ejerció de hada madrina y aprovechó la coyuntura para hacer promoción de su propia tienda de novias en Talavera de la Reina y vestir a la ‘pequeñina’ con un traje que, sin bien no le quedaba mal, era demasiado brillante para mis pobres retinas.
Tras ver la aburridísima despedida de soltera de Chiqui (que no fue más que ella charlando con Amor y con Judith (ganadora de Gh9) en una habitación de hotel) , la novia se hizo la sorprendida al ver a la Milá en una limusina rosa y al contemplar como unos bailarines vestidos como para bailar tango se marcaban un ‘Colgando en tus manos’ de Marta Sanchez y Carlos Baute.
Ya en plató, la madre de Chiqui no podía estar más seca y sosa, al igual que su hija, la verdad, que puede que estuviese nerviosa pero eso no excusa para estar tan callada, inexpresiva y borde como estuvo.
Fue la novia la primera en decir sus votos:
Borja, cuando te vi por primera vez cuando yo trabajaba de cajera en el súper y tú venías a preparar el botellón con tus amigos, ya sabes que me parecías un chulo y un prepotente pero decidí darte una oportunidad. Cuando comencé a conocerte de verdad pensé: «Este va a ser mi chico» y así ha sido. Recuerdo nuestra primera noche en Ceuta, donde nos entregamos el uno al otro por primera vez. Tú ya sabes lo bonito que fue ese día, cuando supimos que los dos íbamos a ser el uno para el otro para siempre.. Una mujer que me echó las cartas me dijo que iba a llegar a octogenaria, ójala sea así para vivir más tiempo contigo.
Luego le tocó el turno a un tío de ella y a un primo de él y, por supuesto a Mercedes Milá, quien destacó lo mucho que cuida ella de sus niños de Gran Hermano.
Y la ceremonia falsa (porque la pareja se casó oficialmente un par de días antes) se celebró con mucha lagrimilla y unos fallos de realización garrafales (¿por qué se escuhaban constantemente los murmullos de los invitados?)
Y si la cosa no podía ser más hortera, apareció por allí el ‘terror de las yayas’, David Civera. El cantante nos deleitó con su último hit, que no más que un estribillo alargado (en este caso: «Me ha rozado el corazón’… Ufff, cuanta poesía).
El resto de’ regalos’ fueron unos periquitos, una camiseta del Barça firmada por Xavi y un edredón cortesía los concursantes de Gh14.
Y cuando parecía que la tortura había acabado, ‘Las bodas de Sálvame’ nos tenía preparado la escena más friki y antológica vista en lo que va de 2013: la ‘cantante’ (siempre entre comillas) Malena Gracia, intentando seguir su propio playback, mientras se le salía una teta del vestido, sacó una tarta horrorosa representaba a la propia Chiqui en bikini pero que parecía un golum tomando el sol en Benidorm
Ah, y hablando de playas, la pareja, para subir el nivel, se fue de luna de miel al destino con más glamour y estilo del mundo… Punta Cana. Miedo me da cuando vuelvan y nos enseñen las fotos del viaje.