Una semana después de que la presentadora Paz Padilla fuese fotografiada en topless, otro miembro del universo ‘Sálvame’ ha sido pillado en pleno relax playero. El veterano y polémico Jesús Mariñas no dudó en tumbarse al sol como Dios le trajo al mundo, supuestamente. Y es que el colaborador niega que fuese desnudo y asegura que llevaba un bañador verde aunque la imagen bien vista, contradice esta versión.
Los colaboradores de ‘Sálvame’, como buenos perosnajes públicos que son, por mucho que ellos se nieguen a admitirlo, han padecido el precio de la fama, lo que significa que no pueden esconderse de los paparazzi. Pocos son los tertulianos que se han librado de los más vergonzosos y humillantes robados.
Hace dos años, la revista ‘QMD!’ fotografió (y se mofó) del mismísimo Jorge Javier Vázquez mientras tomaba el sol junto a su novio (por allí también vimos, de lejos, a Mila Ximénez). El presentador salía tan desfavorecido en las instantáneas (con barriga incluida y eso que por aquella época anunciaba un famoso tratamiento contra la obesidad) que juró no volver a pasar por lo mismo. Dicho y hecho, Jorge Javier jamás volvió a bañarse en público.
También han sufrido los robados Chelo García Cortés, quien movió cielo y tierra para que no salieran sus fotos en topless junto a la modelo Sofía Mazagatos; Kiko Matamoros (el que ha salido más favorecido de todos), Mónica Pont (muy mona también) y Belén Esteban. Hace muchos años, mucho antes del cortijo, Mila Ximénez también apareció en topless dándose un baño junto al prófugo Emilio Rodríguez Menéndez.
Otra de las más sonadas portadas que nos han dado los colaboradores de ‘Sálvame’ fue la que protagonizó Lydia Lozano y su, hasta entonces, desconocido (aunque sí muy mencionado) marido Charly.
Pero el 16 de julio de 2013 nos enfrentamos a una de las imágenes más sobrecogedoras e incómodas de ver del año. Una de esas fotografías que nuestras retinas hubiesen preferido no observar. Y es que aquel día el programa mostró en directo una instantánea de veterano colaborador Jesús Mariñas mientras se relajaba leyendo el periódico en una tumbona en una playa de Sitges.
Lo fuerte de la imagen es que, a primera vista, Mariñas va completamente desnudo. No se le ve demasiado porque tiene las piernas dobladas y está de perfil, pero todo indica que nada le tapaba sus partes nobles. ¿Era así?
Tras ver las fotos, el periodista se lo tomó a guasa y juró no estar desnudo, asegurando que en realidad llevaba un bañador verde. Los compañeros lo dudaban pero, tras observar bien la instantánea, llegaron a la conclusión de que la prenda sí existía aunque camuflada.
Sintiéndolo mucho, no estamos de acuerdo. Esto se parece al cuento del traje nuevo del Emperador. Y es que hemos visto una y otra vez la imagen y ahí no hay rastro de bañador alguno.