Lydia Lozano es de las tertulianas de ‘Sálvame’ que más problemas ha tenido con sus compañeros y que más han sufrido en directo y, sin embargo, y a diferencia del resto, nunca ha abandonado ‘Sálvame’. ¿Será porque, en realidad, no lo pasa tan mal o porque sus ansias de popularidad pueden con todo? El 30 de septiembre de 2013, tras una semana de linchamiento, la periodista dijo que ha estado pensando en dejar para siempre el programa, ¿sucederá?
LAS INCOHERENCIAS DE ‘SÁLVAME’
El viernes 27 de septiembre de 2013, en el ‘Deluxe’, minutos antes de que Jorge Javier Vázquez expulsase en directo a Olvido Hormigos- El numerito más ridículo de Jorge Javier Vázquez con Hormigos: «¡Vete a la mierda! Sinvergüenza. ¡Anda ya sucia!»-el presentador le dijo a la exconcejala algo que llamó poderosamente la atención:
La próxima vez que un invitado venga a aquí y hable de la vida privada de los que está aquí (los colaboradores) la entrevista se acaba.
Lo curioso del caso es que Olvido había sido convocada esa noche para hablar, precisamente, de la intimidad de Lydia Lozano, puesto que ambas habían participado juntas en un reality (‘¡Mira Quién Salta!). No entendemos esos caprichosos ataques de dignidad de Jorge Javier Vázquez cuando debería ser consciente de que el éxito de su programa reside, principalmente, en la explotación de la vida privada de sus trabajadores.
Tampoco entendemos que Lydia Lozano se pase el día quejándose de que ni ella ni su marido son personajes cuando ella misma ha provocado que sí que lo sean. Es todo demasiado esquizofrénico, demasiado incoherente. Si de verdad sufren (ella y el resto) tanto con la contradicción, sólo les quedan dos caminos: o se largan de allí o aceptan, de una vez por todas, las reglas del juego.
Lozano está en la encrucijada y el pasado lunes 30 de septiembre de 2013 reconoció que, durante el fin de semana, se había planteado muy en serio la opción de abandonar el barco. ¿La creemos? Obviamente no. Además, como siempre, el conflicto fue rentabilizado de la manera más estrambótica. Pero vayamos por partes y recapitulemos.
EL ORIGEN DEL MALESTAR DE LYDIA LOZANO
Todo comenzó el 23 de septiembre de 201 cuando Kiko Hernández dijo que Charly, marido de Lydia, pasó la noche del jueves en el hipódromo y, allí, apareció «en una actitud cariñosa con una joven mulata». Lozano se lo tomó a risa pero la cosa ha ido a más y aunque, no quiera demostrarlo, dicen que está muy «cabreada». El colmo de esta historia llegó dos días después, cuando el programa le informó que la mujer con la que se había visto a Charly había acudido al plató. Durante horas nos vendieron esa moto (sí, sí, nos la vendieron a los espectadores, no a Lydia) y finalmente se supo que era una broma. Lydia hizo como que le hacía gracia, pero Kiko Hernández le advirtió que todo lo que él había contado es verdad.
Luego, a cuento de la polémica salida de Luis Rollán del programa (Un año y medio antes) Lozano se enfrentó a sus compañeros porque ella les acusó de haber «echado» de mala manera al ex colaborador.
Otro frente abierto para Lydia fue cuando, el 25 de septiembre de 2013, Lozano se encontró por ‘casualidad’ (corrió detrás de ella por los pasillos de T5) con su excompañera en ¡MQS! Sonia Ferrer y ésta le echó en cara su mala profesionalidad como periodista cuando acusó a su novio, Muñoz Escassi, de haber agredido a un periodista.
El 26 de septiembre de 2013 Lydia no acudió a trabajar, pero ‘Sálvame’ le dedicó más de dos horas hablar de su persona (y todo porque se rió de un comentario que hizo Jesús Mariñas sobre Chayo Mohedano, hija de Rosa Benito). Ahí salió de todo, desde su pasada hasta su falta de profesionalidad. Pero todo explotó al día siguiente cuando, directamente, se le hizo un consejo de guerra a la periodista y todos sus compañeros la machacaron.
LYDIA SE PLANTEA IRSE DE ‘SÁLVAME’
El 30 de septiembre de 2013 Lydia llegó, dijo, muy mal a ‘Sálvame’ tras un fin de semana durísimo (según ella, que con esta mujer nunca se sabe). Rosa Benito le llamó para preguntar cómo estaba, pero no se lo cogió y optó por escribirle un mensaje al móvil. Lydia no estaba para nadie. Pero fue entrar en el plató y el programa le puso un vídeo de Chayo Mohedano, hija de Benito, en el que hablaba así de Lozano:
De la persona que más se ríen en el programa es de ella.
Lo mejor es cuando, una vez de vuelta al plató, Rosa, como para justificar las palabras de su hija, dijo:
Ella no lo dice para hacer daño a Lydia, sólo para que piense lo que duele cuando se ríen de uno mismo.
Eso es amor de madre.
Pero el ataque de Chayo no fue nada comparable al de Kiko Hernández quien volvió a decirle a Lydia:
Esto ha sido una puñalada que no se la voy a perdonar. A partir de hoy tengo una compañera menos.
Lydia, cual damisela desesperada, se encerró en ese cubículo sucio al que llaman celda de castigo para tener una conversación más tranquila junto con esa especie de ‘bombero pirómano’ de Jorge Javier Vázquez. El presentador, tras haber creado el conflicto con Kiko H., le dijo a Lydia:
¿En qué te puedo echar un cable?
Lozano: Ellos me tienen un rechazo total
J.J.Vázquez: ¿Se te ha pasado por la cabeza dejar el programa?
Lozano (compungida): Sí, pero sería un palo. A mí me gusta trabajar y no están las cosas como para decir que no a un trabajo, pero lo he pensado. Y no tener ganas de ir a currar es fuerte.
Luego entraron todos en la celda y comenzó una terapia de grupo tan común como estéril en ‘Sálvame’. Vázquez, con su risilla maliciosa, dijo que había pillado a Lydia llorando durante la publicidad y luego aseguró que la rubia es un pilar fundamental del programa. Matamoros, a su lado, se partía de la risa y dijo:
Lydia tiene que pedir perdón y no volver a hacer ciertas cosas.. No es algo circunstancial, no se puede quedar en anécdota. Es una mujer poco solidaria.
Luego llegaron las disculpas de Rosa y de Mila por haberse pasado días criticando a Lydia y, desde casa, volvimos a tener la misma sensación de dejá vù. Siempre pasa lo mismo. Se tensa la cuerda y nunca llega la sangre al río.
