‘La Voz Kids’, la versión infantil del famoso concurso de T5, ya se ha consagrado como el nuevo fenómeno televisivo del año. Su segunda entrega, emitida el jueves 13 de febrero de 2014, se hizo con un brutal 30% de share (5,5 millones de espectadores). Merece el éxito. La gala fue emocionante, divertida y mucho mejor que ‘La Voz’ de los adultos.
Es increíble ver a un crío de 10 o doce años tomarse con deportividad y madurez el rechazo. De momento, no hemos visto a ninguno que se lo tome mal ante las cámaras. De hecho, cuando lloran es por pura emoción y alegría. Estas son las dos palabras que confirman el éxito de un show que va a convertirse en un hito y que, además, va a hacer que Telecinco (junto a ‘El príncipe’) recupere el trono de las audiencias y del entretenimiento familiar.
A excepción de un fallo técnico por el que pensamos que, tras casi una hora de emisión iban a volver a repetir el programa, la de anoche fue una gala redonda. Los niños volvieron a ser los protagonistas, unos auténticos roba-lágrimas. De hecho, no molesta el tono dulzón y cursi del concurso, para nada. Aquí, cada participante, es mejor que el anterior. Puede que el problema sea ese, que como son niños, todos te gustan, o cuesta más rechazarlos. Por ello, los coaches se giran con casi todos, por lo que se resta intriga.
Malú, Bisbal y Rosario estuvieron en su sitio, divertidos y empáticos, aunque, eso sí, la pequeña del clan Flores es la mejor de todos, es una auténtica madraza que nos hace vivir y compartir sus emociones ante el espectáculo.
Hubo grandes momentos en la noche. El primero de todos ya ha hecho historia. Lo protagonizó Carmen, una criatura de 8 años que cantó el ‘Solamente tú’ de Pablo Alborán. Los tres coaches no tardaron ni treinta segundos en darse la vuelta. Ponía los pelos de punta. Además, tenía un desparpajo y una seguridad que ya quisieran muchos.
Tras la actuación, la criatura eligió a Malú y la coach expresó lo que todos estábamos pensando:
Carmen es para comértela a mordiscos, para meterla en un bote, llevártela a casa, meterla en un bolso. ¡Para comértela a mordiscos y no dejar ni un trocito!
Bisbal también se emocionó al confesar que la niña le recordaba a su propia hija, Ella.
Otra gran actuación fue la de Daniel, un pre adolescente, que parecía el mismísimo Raphael en el escenario. Su seguridad (digna para que Jesús Vázquez se arrodillara ante él) era, quizá excesiva, pero los tres coaches se dieron la vuelta y finalmente se quedó con Bisbal, que le dijo:
Me he quedado un poco flipado con tu actuación. Este programa no deja de sorprenderme porque eres un niño tan profesional que pareces un adulto. Un artista de los pies a la cabeza. Me encantaría que te unieses a mí equipo porque serías una pieza clave en él»
También nos impresionó Carlos Alfredo, un niño latino que encandiló a Rosario y a Bisbal, con el que no sólo se quedó, sino con el que cantó un dúo en el backstage.
También destacó Lucía, una niña con voz lírica y fan de Monserrat Caballé que fue elegida por Rosario.
Al final, lo equipos quedaron así: Bisbal fichó a Carlos Alfredo, Dani y Elena. Rosario a Teresa, Lucía, Inma y Alba y Malú sumó a Carmen, a las amigas Iraida y Paola, a Pilar, Aaron y Sara.
Y como resumen, nos quedamos con una frase de Rosario:
Sólo quiero hacer ‘La Voz Kids’, ya no quiero hacer ‘La Voz’ de grandes»
Estamos contigo Rosario. Nosotros también queremos lo mismo.
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