Fue una de las imágenes del día aunque seguramente no tuvo nada que ver con la espontaneidad. El pasado 17 de febrero de 2014 , Paula Echevarría y Miguel Ángel Silvestre visitaron ‘El Hormiguero 3.0’ minutos antes del gran estreno de ‘Velvet’ (A3) y nada más entrar en plató, el actor revolucionó las redes sociales plantándole un beso al presentador Pablo Motos. Toda una estrategia de promoción algo torpe e infalible. Paula Echevarría, por su parte, evitó (como era lógico) las polémicas que la han rodeado en los últimos meses y se dedicó a decir maravillas de sus compañeros de reparto y de su marido, David Bustamante.
Nada más y nada menos que 4,8 millones de espectadores (un 24,6%) de la audiencia vio el estreno en Antena3 de ‘Velvet’ la nueva, lujosa y estupenda serie protagonizada por Miguel Ángel Silvestre y Paula Echevarría. Treinta minutos escasos antes del arranque, los dos actores se pasaron por ‘El Hormiguero 3.0’ por aquello de la promoción y la estrategia les salió redonda. La entrada al plató no pudo ser más efectista.
Los dos intérpretes realizaron una fantástica entrada a bordo de un elegante coche clásico tipo años 60. Cuando se bajaron, parecían que iban a besarse pero sin embargo finalmente fue Pablo Motos el que se llevó el beso de uno de los hombres más deseados del panorama español Miguel Ángel Silvestre. Obviamente, la redes sociales, con Twitter a la cabeza, se volvieron absolutamente locas con la imagen.
El beso en sí pudo ser un poco torpe, y algunos dirán que innecesario, pero es un acto de promoción barato y efectivo. ¿Por qué? Por comparación. Mientras, en T5 se estaba estrenando otra serie, B&B, se emitía la premier en unos céntricos cines de Madrid con los protagonistas. Una premier, por cierto, que no hizo mucho ruido a nivel audiencia (ni en las redes tampoco), al igual que la ficción, que se conformó (a pesar de una machacona campaña publicitaria) con un 14% de share,
En la entrevista, Silvestre y Echevarría fueron todo risitas y buenas palabras para la serie y para el resto del reparto. Paula hizo caso omiso (como era natural) a las acusaciones (por parte de Mediaset) de plagio que la han puesto en el disparadero durante las últimas semanas (al parecer copia los looks de su blog de otras bloggers) y Silvestre, siempre inseguro y menos diestro para la promoción, dijo que sí a todo y volvió enamorar a la cámara.
Los actores contaron detalles de la serie como que en los tres primeros capítulos pasan cosas muy impactantes y que a partir del cuarto capítulo hay un gran giro que convierte a la ficción en una comedia romántica también con sus momentos de tensión y dificultades pero con momentos muy divertidos.
«Estos personajes son muy divertidos cuando se quieren, no son nada ñoños»
sentenció Paula Echevarría.
Por otro lado, ambos actores dijeron están de acuerdo en que si el público se cree que están muy enamorados significa que han hecho muy bien su trabajo. Miguel Ángel por su parte afirmó estar muy seguro de distinguir el trabajo de su vida privada, aunque fue ella la que dio el titular de la noche:
David (Bustamante) no ve las series que yo hago. Es mejor. Así nos evitamos problemas.
