Si nos basamos en la audiencia, Ignacio Corrales no ha sido un buen director para TVE. En sus dos años de mandato, la pública ha pasado de un 11,5% a un 9,5% de share. Corrales deja así una estela de fracasos y malas decisiones que han provocado su dimisión. ¿Cuáles han sido sus errores más sonados y frecuentes? ¿Cómo se puede solucionar la situación de TVE a partir de ahora?
El 24 de julio de 2012, Corrales fue designado por el Presidente de Radiotelevisión Española, Leopoldo González-Echenique, con el objetivo de reflotar la audiencia del grupo de canales de la pública. En aquella época, La 1 contaba con una media de 11,5% de cuota de pantalla. Es decir, la situación ya era crítica antes de la llegada de Corrales. El problema es que el nuevo director de TVE hundió más la cadena, dejándola, en junio de 2014, con un 9,5% de share.
Ficción, programas de entretenimiento e informativos; estos son tres de los pilares fundamentales de cualquier cadena de televisión y los tres talones de Aquiles que no ha sabido gestionar Corrales.
El problema que ha tenido TVE en estos dos últimos años es que ha dado la imagen de ser un barco sin rumbo. La decisiones tomadas no han sido coherentes y, lo que es peor, la audiencia ha dejado de confiar en la cadena. Corrales vendió que el nuevo enfoque de la pública era el de «apostar por nuevos valores más cercanos a la realidad social» sin saber muy bien qué significaba eso.
FICCIÓN: POCOS (Y MALOS) ESTRENOS, CANCELACIONES INOPORTUNAS Y VIEJAS GLORIAS
Directamente, la pública ha expulsado al espectador, casi le ha obligado a cambiar de canal. ¿Por qué? Pues porque todo lo que funcionaba o bien lo ha eliminado, o bien lo ha maltratado. Un claro ejemplo es el de la ficción.
Uno de los grandes errores de la cadena pública fue dejar escapar ‘Amar en tiempos Revueltos’ por no llegar a tiempo a cerrar un acuerdo económico con su productora (Diagonal), que finalmente, le hizo un lavado de imagen a su serie y se la llevó a A3 (‘Amar es para siempre’).
‘Amar en tiempo revueltos’ era el pilar de TVE en las tardes, líder absoluto en su franja horaria. A la serie española se le unían las clásicas telenovelas latinoamericanas que si bien no tenían buena prensa, el público les era muy fiel. Daban audiencia.
Pero como decíamos, TVE dejó escapar ‘Amar…’ y su lugar lo ocupó ‘Gran Reserva: el origen’, spin-off diario de ‘Gran Reserva’, uno de los grandes éxitos de la etapa anterior de la pública. La nueva serie fue un desastre de calidad y de audiencia y fue cancelada en agosto de 2013.
Luego tenemos el caso de ‘Los Misterios de Laura’, una magnífica serie producida por Boomerang, que ha sido maltratada hasta la extenuación (sus tres temporadas se han estrenado tarde y mal) y, aún así, la audiencia le ha sido fiel. Resulta increíble que un producto tan querido por los espectadores ( y que ya cuenta con una versión en Estados Unidos) sea ninguneado por la propia cadena que lo emite. Y encima, cuando a Corrales se le preguntaba al respecto, no sabía qué contestar. Literalmente.
Hasta ‘Cuéntame cómo pasó’ (el éxito más rotundo de TVE) ha sufrido en la temporada 2013-2014 una sonada crisis de popularidad. Las tramas se han encrudecido, el tono ha cambiado y se ha obviado el marco histórico tan característico de la serie. De hecho, han sido muchos los fans que han visto una influencia política en la historia puesto que la pareja protagonista (el matrimonio Alcántara) se divorciaba coincidiendo con la llegada de Felipe González al poder en el 82.
El gran fracaso de ficción que ha sufrido TVE en los últimos dos años ha sido ‘Stamos Okupa2’, aunque no se le puede achacar a Corrales puesto que, aunque se estrenó en septiembre de 2012, es un proyecto encargado antes de su nombramiento.
A TVE le falta un nuevo éxito en ficción. No se puede vivir de antiguas glorias como ‘Cuéntame’, ‘Águila Roja’ o ‘Isabel’. Se necesita apostar por formatos novedosos y de calidad que rebajen la edad de espectador y sean más masivos.
INFORMATIVOS Y LA CRISIS DE CONFIANZA DE TVE
La peor de las reputaciones se la ha ganado TVE gracias a los informativos, división dirigida por Julio Somoano, quien ha mantenido sonadas tensiones internas con Corrales (otra de las causas del abandono del director de la cadena). La pregunta que se hacían unos y otros ha sido ésta: ¿la caída de la audiencia se ha producido por una falta de credibilidad informativa o por una parrilla poco competitiva?
Está claro que la función primordial de una cadena pública es la de informar de manera objetiva, eficaz y plural. La actual TVE no lo hace. Es imposible confiar en un telediario que, por ejemplo, tratan de manera muy secundaria la imputación de la infanta Cristina en el ‘caso Noós’ (sin vídeo y sin entrar en detalles).
Y para colmo de males, Corrales postergó a horario de discoteca a una de las mayores glorias de TVE, ‘Informe Semanal’, un programa informativo que había perdido credibilidad y , por lo tanto, audiencia en los últimos años.
Si un canal financiado por el Estado no goza de la confianza de la audiencia en lo más básico -la información- da igual cómo sea el resto de la parrilla.
PROGRAMAS DE ENTRETENIMIENTO: EL GRAN BATACAZO
Como decíamos, tras el cierre de ‘Amar en tiempo revueltos’ y el rechazo a las telenovelas, La1 de TVE perdió uno de sus caballos de batallas: las tardes. ‘+Gente’, ‘Tenemos que hablar’ y ‘Letris. Ni un sólo estreno en esa franja ha llegado a cuajar. ¿Solución? Volver a las series.
Caso aparte es el de ‘Entre todos’. Más allá de las críticas recibidas, este programa tiene un coste muy elevado y beneficia a la productora del anterior director de contenidos de TVE con el PSOE, Pablo Carrasco, y hasta hace poco director de Canal Sur. En Prado del Rey se preguntan por qué Carrasco tiene despacho en las dependencias de TVE en Pozuelo de Alarcón mientras su invento no alcanza el 10 por ciento del share.
En programas de entretenimiento es donde la crisis de TVE se ha hecho más palpable. A excepción de ‘Masterchef, Ignacio Corrales no ha dado ni una. ‘Uno de los nuestros’, ‘Generación Rock’, ‘Código emprende’ …y más recientemente, ‘El pueblo más divertido’ han sido auténticos batacazos de audiencia.
Repetimos que Corrales y su equipo no han parado de hablar de «valores más cercanos a la realidad social». Nosotros, pues, nos preguntamos: ¿qué cercanía puede tener un programa como ‘El pueblo más divertido’ que se basa en explotar la imagen más tópica y anticuada del ambiente rural? Nota para el nuevo director de TVE: lo que necesita la cadena es objetividad, pluralidad informativa y producción propia que dé trabajo a más gente. Se trata de mirar al futuro con un plan claro e innovador que provoque confianza.