El 3 de julio de 2014, ‘Sálvame’ sufrió una auténtica catarsis. Rosa Benito sufrió una crisis como nunca antes y Yong Li, el nuevo colaborador, destapó (consciente o inconscientemente) todas al artimañas del programa. Lágrimas, miedo e ira que han puesto en jaque al cortijo.
Fue un momento muy tenso. Nada más arrancar el ‘Sálvame diario’, Belén Esteban y Mila Ximénez entraron en el plató llorando. Las colaboradoras no podían ni hablar. El ambiente era fúnebre. ¿Qué había ocurrido? Su compañera, Rosa Benito, acababa de sufrir un «desvanecimiento» por algo relacionado con, cómo no, Amador Mohedano.
LOS HECHOS
La historia era la siguiente: Yong Li, el adolescente chino de ‘SV2014’ y nuevo colaborador de ‘Sálvame’, había hecho una entrevista a Amador Mohedano (del que se hizo amigo en el concurso de supervivencia) en su casa de Chipiona y, al parecer, le habría dicho que el programa le había pedido que dijera que su casa estaba «hecha una mierda». Rosa Benito, se enfadó porque pensaba que desde ‘Sálvame’ se había urdido un plan contra su exmarido y tras una gran discusión con los directores, se desmayó y fue trasladada al servicio médico de T5. Todo esto antes de empezar el programa.
¿YONG LI ABRE LA CAJA DE PANDORA?
Bien, ahora vamos a analizar los hechos. En realidad se vivió una auténtica crisis en ‘Sálvame’ que se intentó tapar de manera desesperada. Yong Li (que no olvidemos que, por muy gracioso que sea, es prácticamente un niño) dijo lo que ya se sabía, pero que nadie había dicho en voz alta: que en ‘Sálvame’ se ‘retocan’ ciertos hechos.
La guionista [que le acompañó a Chipiona] me dijo que si quería estar en ‘Sálvame’ tenía que tener más picardía. Me dio consejos y me dijo que exagerara, que dijese que la casa de Amador estaba sucia. […] Es verdad que el baño de la casa olía mal y estaba un poco desordenada, pero yo no quería contarlo, se lo dije a la guionista, pero no quería decir nada malo en el programa. Si alguien te invita a su casa y te trata como a su familia, no está bien decir cosas malas. Yo no soy así. La guionista me estaba dando consejos y me dijo: «Si Amador te dice algo, tú échale la culpa a los directores».
Todo esto lo dijo Yong Li visiblemente acobardado, muerto de miedo. No sabemos si era consciente o no pero lo que había hecho era destapar lo que ya se sospechaba de ‘Sálvame’. Es cierto que ese es un tipo muy concreto de televisión, que tanto el programa como como el espectador han llegado al acuerdo tácito de que lo que se ve y lo que se ofrece está contaminado y decorado. Pero cuando se dice así, de manera tan rotunda, surgen los problemas. ¿Se ha exagerado entonces cuando se ha hablado de temas más ‘graves’? ¿Se tiene que poner en duda todo, absolutamente todo, lo que nos dicen?
En cuanto Yong Li habló, desde la dirección del programa se quiso amortiguar el golpe como pudo. Rápidamente, el director, Raúl Prieto, desmintió al nuevo colaborador:
La guionista te dijo que contaras lo que habías visto, que no te inventaras nada.
Yong Li, nervioso se contradijo. Estaba acorralado y rompió a llorar desesperado:
Si por mi culpa alguien se desmaya, es lógico que no me sienta cómodo. Quizá yo no valga para la salsa rosa.
Jorge Javier quiso restarle hierro al asunto:
¿Queremos dejar de ser dramáticos? Uno no es tan importante como para que por ti se haya desmayado nadie.
Pero el chino quería tirar la toalla. No podía más. Seguramente, la dirección de ‘Sálvame’ no quería que el nuevo colaborador, encima, quedase como un ‘mártir’ después de haber dicho que en el programa se manipula a la gente. Por ello, Mila Ximénez le dejó claras un par de cosas:
Entiendo que te puedas sentir mal pero lo que me parece muy injusto es dejarnos a nosotros como si fuéramos asesinos a sueldo, aquí no se simula nada y creo que es el éxito de este programa.
Yong Li se echó para atrás y explicó que sus palabras no se referían a ellos y les pidió disculpas. Es decir, que el chino quedó como un ‘metepatas’ que no sabe ni lo que dice.
ROSA BENITO TOCA FONDO
Y mientras, Rosa estaba mall. Belén Esteban acudió a la enfermería de T5 y allí pudimos escuchar los lamentos de la exmujer de Amador Mohedano abrazándose a su amiga.
La he visto fatal, yo le he dicho que no llore, que se va a arreglar todo, está tumbada en la camilla con un ataque increíble, fatal. Dice que no puede más, que su vida es una mierda.
Transmitió la Esteban. Jorge Javier, en plató, parecía irritado:
Algo está pasando aquí. Que porque alguien diga esta idiotez a Rosa le coja este ‘parraque’, si le pasa esto tendrá que dejar el programa.
Finalmente, la hija de Rosa, Chayo Mohedano, acudió a la cadena a recoger a su madre y ambas se marcharon a casa.
Y tras todo ese drama, por fin se emitió el dichoso reportaje de Yong Li en Chipiona y como ya se había anunciado, las cámaras no habían entrado en casa de Amador. Es decir, que no se entiende el porqué de tanto drama.