Terrible lo que vimos el 9 de mayo de 2017 en ‘Supervivientes 2017. En Tierra de nadie’. La, hasta ahora buena y simpática, de Paola Caruso agredió a una de las Mellis. Lo sorprendente es que el programa no la expulsase. ¿Se deben permitir actitudes de este tipo?
Lo que sucedió fue lo siguiente: Raquel y Bibi, más conocidas como ‘las Mellis’ estaban barriendo su zona de arena de Tierra de Nadie y Paola (la que llevaba semanas en la ‘Zona muerta’, aislada) decidió instalarse en un ladito con su esterillas.
Las mellizas se cabrearon con la italiana. No iban a permitir que se pusiese cómoda en una zona que habían limpiado ellas, y sobre todo después de que días antes, les hubiese robado comida.
Raquel y Bibi quisieron echar a Caruso pero ella se negó a irse por lo que pasaron a la acción tirándola de la esterilla y luego dándole la vuelta.
Paola se cabreó, se puso en pie y comenzó la guerra. La italiana a gritos empujó a una de las ‘Mellis’ y la agarró por el cuello. La otra hermana intentó separarlas pero Caruso la empujó a ella también.
Pero lo más increíble de todo es que la dirección de ‘SV2017’ no la expulsase. ¿En serio se pueden permitir actos así en un programa? Es indignante y preocupante. Nos quejamos en las redes sociales de todo pero a la hora de la verdad, nada. Esta es una de las pocas veces que sí que hay que quejarse. Entendemos que es un reality y que el conflicto es espectáculo pero ha de haber un límite.
Y es que no, a Paola no la expulsaron, la sancionaron con escasez de comida. Eso es igual a nada.