Comienza el verano y termina la temporada televisiva 2016-17. Este curso ha habido de todo y hoy repasamos lo peor que hemos tenido que padecer como espectadores. ¿Qué cadena se lleva la palma? No, no es Telecinco pero casi.
En verano casi no hay estrenos y los que hay dejan mucho que desear (‘Mad in Spain’ de T5, por ejemplo). Por eso, de septiembre a julio, es cuando las cadenas echan toda la carne en el asador. Como cada año, se han estrenado cosas buenas y malas. Entre las primeras, destaco, sin duda alguna, ‘MasterChef Celebrity’ (TVE), ‘Sé quién eres’ (T5), ‘La casa de papel’ (A3) y sobre todo, ‘Lo que la verdad esconde: El caso Asunta’. Hay más pero merecen una lista aparte.
Vamos pues con lo peor de este curso televisivo. Hablamos de productos de calidad paupérrima y no lo digo yo, lo dice una audiencia que ha pasado de largo de ellos.
Curiosamente, la palma en cuanto a ‘desperdicios televisivos’ se refiere, se la ha llevado esta temporada, La1 de TVE. Excepto el ya mencionado ‘MasterChef Celebrity’, todos sus estrenos no sólo han sido el hazmerreír de la crítica sino que se han convertido en sonoros (y caros) fracasos.
Eso sí, el resto de cadenas tampoco se quedan atrás. Repasemos pues los 10 peores productos televisivos de la temporada 2016-2017
10- ‘Tú sí que sí’ (laSexta)
Cristina Pedroche no es infalible. Para muestra este programa de segunda que copiaba hasta el título de ‘Tú sí que vales’ (T5). Un producto innecesario que se hizo gracias a no sé qué misteriosos acuerdos pero que se quedó en una media de 5,6% de share.
09. ‘Hazte un selfi’ (Cuatro)
Lo increíble de este programa es que se mantuviese en antena 5 meses. Noventa y cuatro emisiones haciendo… Atención… ¡Un 2,4% de share de media! El problema era el de siempre, querer competir con ‘Sálvame’ con los mismos contenidos pero sin gracias. A ver, señores de Mediaset, el chismorreo no da para tanto, sobre todo si coincide en horario.
08. ‘Proyecto Bullying’ (Cuatro)
La idea podía ser cuestionable (denunciar el acoso escolar) pero era interesante y valiente. Tras luchar contra la ley (en un principio un juez canceló su emisión), Mediaset lo convirtió en una serie documental de cuatro entregas que eran puro despropósito. El formato luchaba contra sus propios límites, por lo que casi todos sus protagonistas (menores) estaban pixelados. Es decir, al final sólo se veía a Jesús Vázquez rodeado de ‘seres’ desfigurados y de voz metálica. Terrible.
07. ‘A cara de perro’ (Cuatro)
Soy un gran amante de los perros. La labor del programa, por lo tanto, es más que apetecible para alguien como yo. Exceptuando el imperdonable fallo de edición que creó tanta polémica (manipularon las imágenes para hacernos creer que habían rescatado a un can que, en realidad no había sobrevivido) el show no está mal hecho.
El problema es su conductor, el exboxeador Javier García Roche, un señor que deja a Frank Cuesta a la altura de la sirenita. Y no hablo de la acusación de violencia de género que pesa sobre él, me refiero a su comportamiento agresivo, chulesco y prepotente que muestra en pantalla.
El show, aunque comenzó con un prometedor 10% se ha ido desplomando con una media de un 7,3% de cuota de pantalla.
06- ‘El amor está en el aire’ (A3)
Juan y Medio presentando una versión no oficial de ‘Lo que necesitas es el amor’. Sólo faltaba la mano de José Luis Moreno para que el programa se convirtiese en el referente casposo de la televisión moderna.
Moreno no tenía nada que ver pero no hacía falta. Era un programa falso, deprimente, gris y muy muy aburrido.
05- ‘El final del camino’ (TVE)
Pretendía ser el nuevo ‘Águila Roja’ pero se quedó un par de puntos por debajo de ‘Las aventuras del capitán Alatriste’ (¿Eso es posible? Sí). Una superproducción low-cost indigna de cualquier carnaval de barrio. Mucha peluca, mucha acción pobre y unos efectos de esos que dan pesadillas.
04- ‘Reinas’ (TVE)
La pública no aprende. Es incomprensible que se le siga subencionando a un señor como José Luis Moreno después de llevar años demostrando, no sólo que el público ya no le respalda sino que le falta profesionalidad.
‘Reinas’ era la obra de un mitómano, de un productor desmedido y de ego descomunal que no sólo era malo y poco transparente (los guionistas que se suponen que firman el libreto están ‘desaparecidos’, nadie sabe quiénes son y qué han hecho. ¿Lo escribió todo Moreno?), sino que encima era carísima. Que hagan lo que quieran en las cadenas privadas. En la pública, algo así es inadmisible.
03. ‘Dani y Flo’ (Cuatro)
En serio, ¿por qué siguen confiando en personajes que llevan años sin cosechar un solo éxito? ¿Por qué continúa en antena un programa que hace un 3,4% de share (y eso en días buenos)? Misterios de ‘Vasilelandia’.
Lo que está claro es que Dani Martínez y Florentino Fernández no tienen gracia. Son casi ofensivos aunque salvamos una cosa: sus sketches (copiados de ‘El Informal) en los que doblan ‘Mujeres y hombres y viceversa’ son simplemente maravillosos.
02. ‘All you need is love … O no’ (T5)
Otra ración de Vasile y sus incompresibles decisiones… O no. El Consejero Delegado de Mediaset España es muy amigo de Risto Mejide, lo que explicaría que siga manteniendo un show que pinchó desde su estreno.
Hablamos de uno de los peores espacios emitidos en los últimos años en T5. Otra revisión de ‘Lo que necesitas es amor’ pero con Risto Mejide humillando al personal y queriendo ser Frank Blanco en ‘Zapeando’. Llega a ser tan agresivo todo que molesta.
Mejide es un personaje único pero no vale para el prime-time de una cadena principal. Hay que dejarle de colaborador o con sus entrevistas ‘machaconas’ en Cuatro. No hay que pedirle más.
01. ‘iFamily’ (La1 de TVE)
Es la primera vez en toda mi vida que no he conseguido ver un piloto entero para poder, después, hacer una crítica. No aguanté más de media hora y con dolor.
Mi falta de profesionalidad se justifica ante la que ya es la peor serie de la última década (sí, peor que ‘Cheers’, ‘Fenómenos’ o ‘Alatriste’). Era tan mala que, por momentos, podías pensar que era una parodia de sí misma.
Era imposible que algo así fuese comprado desde una televisión, y menos con el dinero del contribuyente.