No teníamos suficiente con ‘Mad in Spain’ que pocos días después, el 25 de julio de 2017, T5 estrenó su segundo despropósito veraniego: ‘Me lo dices o me lo cantas’, una nueva revisión de ‘La parodia nacional’ que, por lo que parece, no gusta ni en la cadena.
Pensaba titular esta crítica como «‘Me lo dices o me lo cantas’, el quiero y no puedo de Telecinco por hacer ‘Tu cara me suena'». Pero no. Comparar ambos concursos sería infructuoso. El de Antena 3 es espectáculo y el de Mediaset no se sabe lo que es.
Nunca he soportado ‘TCM’. Me parece infantil, superficial y aburridísimo. Esto no me impide reconocer que como producto televisivo es de primera, con un sentido del show instintivo y brillante.
Ambos espacios comparteN el hecho de ver famosos imitando a otros famosos y cantando. Ya. El verdadero referente del nuevo concurso de Telecinco es, en realidad, otro formato que en los 90 popularizó A3: ‘La parodia nacional’, aquel en el que los participantes adaptaban letras de canciones para parodiar elementos de la actualidad.
‘MLOMLC’ se iba a estrenar hace meses pero se retrasó. Las malas lenguas dicen que el todopoderoso consejero delegado de Mediaset, Paolo asile, no estaba muy conforme con el producto y lo quiso emitir de ‘tapadillo’. Es decir, en verano.
Visto el estreno, entendemos las reticencias que había hacia el show, si es que alguna vez las hubo. Pero antes de ‘entrar a matar’, puntualicemos dos cosas:
La primera es que prefiero mil veces que se hagan programas para el verano a que se emitan reposiciones o ‘latas’ extranjeras (las primeras al menos dan trabajo). La segunda es que el concurso es lo que es, va dirigido a un público muy concreto y puede servir para pasar el rato.
Pero aún con todo, se podía haber hecho mejor. No es tan difícil. Para empezar, no hay el menor atisbo de espectacularidad en el programa. Se nota que el presupuesto es limitado. No hay profundidad de campo, ni escenarios espectaculares. Todo son planos medios, pobres y, sobre todo, antiguos.
T5 vuelve a los 90. Sí. A confundir popularidad con ordinariez; Al ‘caca-culo-pedo-pis’ de toda la vida; A sus personajes de siempre. Pero lo peor de todo es que un formato que pretende ser cómico e irónico, no hace gracia. Las letras de las canciones son fáciles y poco trabajadas.
La mecánica del show es muy simple. Hay cuatro equipos representado por cuatro jueces, Yolanda Ramos, Santi Millán, Cristina Rodríguez y Jorge Cadaval. Primer fallo: Si es un programa musical, ¿por qué no hay cantantes en el jurado?
Los concursantes son un poco de segunda aunque alguno puede tener gracia para la ‘señora de Cuenca’: Alyson Eckmann, Nagore Robles, Belinda Washington, Hugo Salazar, Rebeca Pous, Xavier Deltell, Carmen Alcayde, Corina Randazzo, Ken Appledorn, Javi Martín, Sergio Alcover y David Carrillo.
Decir que Carmen Alcayde y Corina Randazzo abandonarán el concurso en breve (se supo hace meses, durante la grabación) pero que lejos de lo que se creía- que Vasile las echó-, ambas se fueron por motivos personales tal y como informó en su momento Vanitatis.
El show, que la cadena produce en colaboración con FremantleMedia, tiene a su favor lo que se esperaba, la caracterización de los concursantes y que casi no hay tiempos muertos entre actuación y actuación. No hay mucha más bueno que decir.
EL DESPELOTE DE REBECA
Hablemos de los momentos más destacados ( y vergonzosos) de la gala inaugural. El primero lo protagonizó Rebeca Tous, componente del grupo de Cristina Rodríguez.
La intérprete del famoso tema, ‘Duro de pelar’ se estrenó imitando a la mismísima Esperanza Aguirre (ojo, y no lo hizo mal).
Tras la actuación de todos los concursantes del equipo de Cristina, los participantes se pusieron a bailar sin venir mucho a cuento y, de repente, Rebeca se desató, se quitó el disfraz de la ex presidenta de la Comunidad de Madrid y mostró el sujetador. ¿Era necesario? No, es Telecinco.
PIQUE DE PACOTILLA
Rebeca también protagonizó el otro momento destacable de la gala, una bronca que no fue tal, un pique que más bien fue un juego.
Pous criticó la forma de cantar de precisamente Corina y Alcayde. Lógico, ninguna de las dos son cantantes y se nota.
Se notaba mucho que tanto la ex protagonista de ‘Un príncipe para Corina’ y la que fue presentadora de ‘Aquí hay tomate’, no se llevan muy bien con el resto de compañeros ¿Es por esto que se fueron del programa?