Qué buena ha sido la primera gala de ‘Gran Hermano Revolution’ y qué bien ha estado Jorge Javier Vázquez. Bueno, esto último no es del todo cierto. El presentador se debe de pensar que ha superado su ‘bache’ del año pasado pero aún le queda una asignatura pendiente.
¿CUÁL ES EL PROBLEMA DE JORGE JAVIER COMO PRESENTADOR?
Lo diré una y mil veces: Jorge Javier Vázquez no sabe leer. En cuanto tiene que mirar el teleprónter se bloquea, falsea la voz y pierde la naturalidad, esa por la que es la mayor estrella televisiva del momento.
Con ‘GH Revolution’, Jorge Javier Vázquez se la jugaba. Mucho. Tras la desastrosa edición 17 del reality, la primera que él presentaba, tenía mucho que perder. Recibió palos a diestro y siniestro y puede que al principio fuese por compararle con Mercedes Milá pero después demostró que ese no era un formato para él.
La super fortuna de vértigo de Jorge Javier Vázquez
Jorge Javier lleva casi toda su carrera enfrentándose a los mismos programas y sobre todo, a los mismos personajes. Su grandeza reside en su capacidad de improvisación, en su sentido del humor y en su afilado cinismo. Pero la humillación (o la agresividad) ‘vale’ cuando hablamos de famosos, de los que participan en el mismo juego que él, no cuando se trata de anónimos con los que el público empatiza mucho más.
En ‘GH17’, Vázquez no se adaptó al programa ni el programa a él. No trataba con empatía a los concursantes y se limitaba a leer un guion que no se creía (lo mismo le pasó en ‘Hay una cosa que te quiero decir’ o ‘Got Talent España).
Luego llegó ‘SV2017’ y Vázquez recuperó su prestigio. Normal, estaba en su zona de confort, donde pudo desplegar su talento.
‘GH REVOLUTION’: PRUEBA SUPERADA
Pero la prueba de fuego llegó el martes 19 de septiembre de 2017. Jorge Javier ya había dicho que nunca en su vida había estado tan nervioso. No era para menos.
Se nota que, o bien Vázquez ha aprendido la lección o le han dado un ‘toque’ en T5. O ambas cosas. Durante el estreno de ‘GH Revolution’ estuvo pletórico. Por fin estaba disfrutando con el reality. Tenía picardía pero no agresividad. Se saltaba el guion, improvisaba y hacía las vces de animador del público (tanto el presente como el de casa).
El problema lo volvemos a repetir: Todo lo bueno que tiene lo pierde cuando lee. Lo ideal sería darle una escaleta u hoja de ruta y que él improvisara, pero eso, en un formato como el de ‘GH’ es imposible. Es tan titánico que no caben las sorpresas.
Pero Jorge Javier aparte, se nota que este año hay inversión y trabajo. Todo es más vistoso, más grande, más sorprendente. No tengo la sensación de haber sido engañado. Los puristas de ‘GH’ ya están haciendo ruido por la decisión de suprimir el canal 24 horas. Ya no estamos en la vida en directo.O sí. Si, como en otros años, ponen tres galas semanales , ¿para qué se necesita más?