El 20 de septiembre de 2017, la estrella invitada de ‘Mi casa es la tuya’ fue Paz Padilla quien abrió las puertas de su impresionante casa madrileña a Bertín Osborne.
Fue una entrevista accidentada en la que la presentadora de ‘Sálvame’ no paró de hablar en ningún momento, mareando a todo el personal.
Detrás de la careta de humorista está Mari Paz, y procuro protegerme. Por eso no doy entrevistas, hablando sobre mi vida privada, desde hace 20 años. No siempre estoy de buen humor, aunque en la tele lo parezca
Así arrancó Paz Padilla su entrevista con Bertín Osborne, quién se acercó a ver a la conductora de ‘Sálvame’ hasta su lujosa casa madrileña.
Fue un programa caótico, casi agotador. La intérprete de ‘La Chusa’ en ‘La que se avecina’ no paró de hablar, gritar, hacer chistes y moverse de un sitio para otro. Bertín se limitó a reírse y poco más.
Para colmo, hubo problemas de todo tipo. Primero rompió a llover y decidieron cargar el sofá y trasladarlo al interior. Luego, hubo cortes constantes del suministro eléctrico, lo que volvió más loca la entrevista (Ojo, fue divertida pero agotadora).
INFANCIA POBRE Y ORGULLO DE HIJA
Para empezar, y como en todas las entregas de ‘Mi casa es la tuya’, la invitada comenzó hablando de su familia y de su infancia:
Mi madre decía que no quería que fuera artista. Pensaba que en el mundo de la artista solo había drogas y folleteo. Yo nunca he visto el folleteo.
Yo he heredado el sentido del humor de mi madre, Doña Lola. Ella nunca está triste, siempre está feliz. Nunca he visto a mi madre llorar, ni estar cabreada.
De pequeña era muy mala. Le prendí fuego a mi casa. Un día cogí un colchón y le metí fuego, para ver qué pasaba. Al final, aquello se salió de lo planeado, y se extendió a toda la casa. Mi madre, que estaba embarazada, se puso de parto del susto.
Me escapé de casa. Me fui con una barra de pan y un trozo de mortadela a un parque cerca de mi casa, y me subí a un árbol. Todo el mundo estaba buscándome, y al final volví a casa, pero me escondí debajo de la cama, fingiendo que me había quedado dormida allí jugado. Mi madre me sacó por las piernas, pero al final no me dijo nada.
En mi casa no había mucho dinero. Mi madre era una busca-vidas. Tenía que ir a la panadería a pedir el pan duro del día anterior. Yo soy una privilegiada. No quiero que a mi madre le falte de nada, pero a mi hija le he enseñado a valorar lo que tenemos, mirando lo que tenía yo en el pasado
Paz Padilla, no te enteras de que te están haciendo la cama en ‘Sálvame’
EL MOMENTO MÁS DURO DE PAZ PADILLA Y SU NUEVO AMOR
Paz, que casi no habló de lo interesante (‘Sálvame’), se tomó su tiempo para recordar a su ex marido y el momento en el que la abandonó:
Mi marido me dejó de un día al otro, y lo pasé muy mal. Me dijo que a él se le había apagado el amor, pero yo estaba profundamente enamorada.
Lloraba mucho, pero nunca le dije que aún le quería cuando cortamos. Llevábamos 7 años juntos. Cuando venía a por la niña, me maquillaba y le contaba chistes, para mostrarle que estaba bien, pero cuando cerraba la puerta me hinchaba de llorar otra vez
Pero, al final, Paz reencontró el amor con Antonio, un ex novio de juventud, con el que se casó en 2016:
Estuve quince años de novia con él. Nuestro reencuentro fue tan especial… Olí algo que me era familiar, y cuando me giré y lo vi, pensé que ‘ya estoy en casa'»
Eso sí, la presentadora no pronunció palabra de la imputación de su marido, hace dos años,tras ser acusado de desfalcar dinero público. Bueno, no lo habló en ‘Sálvame’ durante aquella época (En T5 hubo un silencio absoluto), no lo iba a hacer ahora.
LA HIJA DE PAZ PADILLA DA LA CARA
Padilla se iluminó al hablar de su hija Anna:
Yo parí a Anna y empecé a trabajar a la semana. Dormía con la ropa de mi hija debajo de la almohada y lloraba. Nunca me arrepentiré de haber dejado trabajo por estar con mi hija. Me he dado cuenta de que ahora Anna tiene 20 años y yo he trabajado muchísimo.
Anna Ferrer apareció al final del programa para cenar con su madre y con Bertín. La joven, convertida en una influencer de las redes sociales, aclaró que su madre había sido muy dura con ella pero que también es su mejor amiga.
Como madre, es muy dura. Me castigaba si no sacaba más de un siete. Yo creo que le gustaba tenerme en casa, y por eso me castigaba. Siempre le contaba todo, antes que a mis amigos. Ella me da los mejores consejos, porque ya ha pasado por eso. Por eso tenemos tan buena relación