Tenía que pasar. Jorge Javier Vázquez y Carlota Corredera van a una guerra de egos son igual. Y a ellos hay que sumar a Paz Padilla, Kiko Hernández y David Valldedeperas. Se rumorea que hay una lucha interna entre presentadores y Vázquez no quiere volver. Como él mismo dijo: «Te vas y te crecen los enanos»
Si se piensa es lógico. Cinco presentadores para un solo programa son muchos, sobre todo cuando hay uno, Jorge Javier, con demasiado ego. Desde que comenzó a presentar ‘GH Revolution’ el catalán no ha regresado a ‘Sálvame’ . Y aunque anunció que volvería el 20 de septiembre no le hemos vuelto a ver el pelo ni en ‘Sábado Deluxe’.
Según afirmó Look, el presentador no quiere presentar ‘Sálvame’ por diferencias con la cúpula de La Fábrica de la Tele por el nuevo reparto que se ha hecho con los presentadores (Paz Padilla, Carlota Corredera, Kiko Hernández y David Valldeperas) y por los ingresos publicitarios que, según afirma el citado medio, no le corresponden.
Y aunque Mediaset asegura que Jorge Javier está centrado en la promoción de ‘GH’, tenemos que recordar que el presentador no ha dejado de participar en ‘Sálvame’ o en el ‘Deluxe’ mientras ha estado ‘ocupado’ con otros shows. Aquí está pasando algo raro y no lo pueden ocultar más.
¿Cuál es el problema? Carlota Corredera. Fue ella la que abrió la veda a que cualquiera pudiese ser presentador de ‘Sálvame’. Ella es la nueva Jorge Javier Vázquez, la figura omnipresente en toda la parrilla de T5.
Y claro aquí estamos hablando de dinero, mucho dinero que es el que ganan los presentadores de ‘Sálvame’ por los desplazamientos publicitarios. Tal y como informa Vanitatis, por 45 segundos de telepromoción se llega a cobrar 21.000 en el programa diario (66.000 en el ‘Deluxe) y por 121 segundos, se paga 39.00 euros (140.500 en el ‘Deluxe’).
Obviamente, cuantos más presentadores, a menos dinero toca cada uno y Jorge Javier Vázquez estaba acostumbrado a llevarse la porción más grande del pastel.
Pero este conflicto, de ser cierto ( y todo apunta a que sí) deja a Carlota Corredera muy mal parada. Ya lo hemos dicho varias veces, tras un año de gloria artificial (porque se empeñaron de promocionarla de manera abusiva), ha llegado el momento de que meterse con ella resulta más rentable. Pobre, la que le espera,