Alba Carrillo lo ha pasado muy con el coronavirus pero ya ha vuelto con la misma ‘mala leche’ de siempre.
Tras unas semanas sin aparecer en televisión, Carrillo regresó, el 12 de abril de 2021, a su puesto como colaboradora de ‘Ya es mediodía’ en Telecinco.
Estoy bien, pero lo he pasado muy mal.
La modelo quiso lanzar un mensaje a la población pidiendo que todo el mundo utilice la mascarilla porque tener el covid19 “no es ninguna broma”.
A los negacionistas les pasaba yo mi covid, para que vean que sí existe.
También aseguró haber pasado por todos los síntomas que produce el virus:
Tos, malestar, mal de tripa, pinchazos de tripa, perdida de gusto… Y el olfato, sobre todo para los hombres.
En plató se han reído de su mal olfato con los hombres, pero Alba, muy enamorada del presentador Santi Burgoa, respondió aclarando que en este momento tiene “la pituitaria en mi mejor momento” y volvió a pedir a la gente que tenga cuidado “que la gente se cuide que no es ninguna tontería”.
El ataque de Alba Carrillo a Raquel Mosquera
Por su puesto, Carrillo tenía muchas ganas de hablar de ‘Rocío: contar la verdad para seguir viva’, la docuserie sobre Rocío Carrasco en la que la hija de Rocío Jurado denuncia malos tratos por parte de su exmarido, Antonio David Flores (colaborador de ‘Sálvame’ hasta ese momento).
Alba y Carrasco son íntimas amigas, por lo que la modelo, para defender a Rocío no se le ocurrió otra cosa que atacar a los enemigos de esta, en concreto a Raquel Mosquera, viuda de Pedro Carrasco (padre de Rocío).
La señora que es el paradigma del buen gusto, que no iría a su peluquería así me mataran.
Sonsoles Ónega intentó frenarla, pero no lo consiguió.
Si con ese estilismo se llama peluquera, es como si dices que eres periodista y no sabes ni leer.
Qué bonito. Las que ahora van de feministas defienden a una mujer metiéndose con la apariencia de otra.