¿Dictadura feminista?

Vasile, contra las cuerdas: se enfrenta a un boicot sin igual si no despide a Kiko Matamoros

Campaña en redes contra el colaborador en ‘Sálvame’ por defender a Antonio David Flores

Vasile, contra las cuerdas: se enfrenta a un boicot sin igual si no despide a Kiko Matamoros

Kiko Matamoros es, ahora mismo, la ‘patata caliente’ de Mediaset España.

El 12 de abril de 2021, durante toda la tarde fue Trending Topic el siguiente hashtag: #KikoMatamorosFueraDeLaTV. 

No es la primera vez que ocurre, Matamoros es un personaje polémico pero nunca se han puesto las cosas tan oscuras para él y para sus jefes.

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La hipocresía de Mediaset con el caso de Rocío Carrasco

El 22 de marzo de 2021 cambió la historia de Telecinco y de la presa rosa. Ese día se estrenó ‘Rocío: contar la verdad para seguir viva’, la docuserie sobre Rocío Carrasco en la que la hija de Rocío Jurado denuncia malos tratos por parte de su exmarido, Antonio David Flores (colaborador de ‘Sálvame’ hasta ese momento).

 

La cadena se ha puesto de lado de Carrasco, despidiendo inmediatamente a Antonio David, condenándole como maltratador sin que ningún tribunal lo haya declarado culpable (aunque tampoco inocente, su causa sigue abierta).

No había debate. La empresa se ponía de parte de la supuesta víctima y punto. Pero no quedó ahí la cosa.

Mientras que han despedido a Antonio David Flores siguen contando con Kiko Matamoros, un personaje que también ha tenido sus episodios oscuros con respecto a la violencia machista pero que, parece ser, nadie puede tocar.

Matamoros, además, es amigo de Antonio David Flores, por lo que aprovecha sus intervenciones en ‘Sálvame’ para poner en duda el testimonio de Rocío Carrasco.

De hecho, la posición de Matamoros es tan dura que hasta la presentadora, Carlota Corredera, se enfrentó a él en directo por “comparar a la víctima con el verdugo”.

¿Matamoros debería ser despedido?

Por un lado, mantener a Kiko en ‘Sálvame’ es una contradicción. Si han despedido a Antonio David Flores por presuntos malos tratos pero sin un juicio que lo declare culpable, es ilógico mantener en plantilla a un señor que no sólo tiene su propio pasado oscuro sino que apoya a Flores.

Por otro lado, Matamoros  no sólo tiene derecho a dar su opinión sino que sus argumentos no son erróneos.

Da igual si creemos o no a Rocío Carrasco. Un juez aún no ha dictado sentencia. Hay que tener cuidado. Vivimos en un estado de derecho, la presunción de inocencia es clave.

El problema es que el caso de Rocío Carrasco se ha polarizado en exceso, algo que ha fomentado Mediaset desde el principio. Es peligroso.

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Autor

Sergio Espí

Sergio Espí, guionista y crítico de televisión de Periodista Digital, responsable de la sección 3segundos.

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