Kiko Matamoros quiere ser la nueva víctima de ‘Sálvame’ pero no cuela.
El colaborador ha sido una de las voces más críticas con Rocío Carrasco desde el estreno de ‘Rocío: contar la verdad para seguir viva’, la docuserie de Telecinco en la que la hija de Rocío Jurado denuncia el maltrato sufrido por su ex marido, Antonio David Flores (amigo de Matamoros) y por su propia hija, Rocío Flores (que le dio una paliza a su madre en 2012).
La sorpresa llegó el martes 25 de mayo de 2021 cuando Kiko Matamoros confesó que casi no ha visto la serie documental. Aún así ha opinado todos los días y en muchos programas del asunto.
La razón que dio Kiko para no haber visto un contenido con el que tanto se está trabajando en ‘Sálvame’ es una razón de peso: al comenzar a escuchar el testimonio de Rocío se sintió muy identificado con algunos fragmentos de su vida, porque él también estuvo “cuatro años” sin hablarse con su hijo e hizo todo lo posible por recuperar esa relación.
Todo está muy bien pero Kiko, lo que más le echa en cara a Carrasco es que no se habla con sus hijos. Podría tener, el colaborador, un poco más de empatía ¿no?
Aunque su sufrimiento puede ser comprensible, Jorge Javier Vázquez señaló que, si no ha visto nada del documental, más allá de la primera emisión, su opinión no es “válida” y lo mismo opinan el resto de los colaboradores.
Matamoros se defendió:
Yo he hablado muy seriamente de un problema que tuve con mis hijos y si os lo queréis tomar a cachondeo no es mi problema.
Para María Patiño, por ejemplo, sería una «estafa» ir a un programa de cine para hablar de una película sin haber visto la película; símil que utilizó para referirse a la confesión de Kiko Matamoros. Jorge también le dijo que, si no ha visto el programa, entonces es mejor que no «hubiera opinado nada».
Matamoros, sintiéndose acosado, se fue del paltó para regresar a los dos minutos.
Dos días antes, recordemos, Jorge Javier Vázquez expulsó al colaborador por sus ataques a Rocío Carrasco
